Mi columna en Invertia de esta semana se titula «El plástico como desastre planetario» (pdf), y pretende, al hilo del anuncio de algunos países de plantear una reducción de la producción global de plástico que alcanzaría un 40% en un plazo de quince años tomando como base la producción de 2025, hacer un resumen de una situación desastrosa y llena de mentiras interesadas.
El plástico es un material enormemente versátil, hasta el punto de que el adjetivo «plasticidad» denota precisamente eso, versatilidad, adaptabilidad o flexibilidad. Pero precisamente esa versatilidad, unida a la facilidad de su producción, lo ha convertido en uno de los mayores desastres medioambientales conocidos: entre los años 1950 y 2017 se ...