Un artículo en The Economist, «First electric cars. Next, electric factories?», pone el foco en la sustitución de los combustibles fósiles en los procesos industriales que necesitan aporte de calor, planteando en su lugar el uso de diversas tecnologías sin emisiones basadas en la electrificación.
Los usos industriales son uno de los objetivos posiblemente más complejos en el proceso de descarbonización, superado tan solo por el transporte aéreo, pero es necesario tener en cuenta su descarbonización si se quiere cumplir con los acuerdos firmados.
Obviamente, no es lo mismo hablar de calor hasta los doscientos o trescientos grados, que pueden obtenerse mediante bombas de calor industriales, que de procesos como la metalurgia que precisan de ...