Sobre el «efecto Mar Muerto» y la fuga de cerebros

IMAGE: JOLTS | Economic Policy Institute

Mi columna en Invertia de esta semana se titula «Fuga de cerebros» (pdf), y trata de vincular lo que se ha dado en llamar en los Estados Unidos «The Great Resignation« o «The Big Quit«, los más de cuatro millones de personas en empleos generalmente cualificados que han decidido abandonar voluntariamente sus puestos de trabajo tras la pandemia, con lo que ocurre en las compañías cuando surgen este tipo de fenómenos.

Si tu compañía comienza a experimentar una fuga de cerebros debido a un cambio en las características del entorno, lo que notarás por lo general es algo muy sencillo: que los que se van son precisamente aquellos que pueden planteárselo, es decir, aquellos que no tienen demasiados problemas a la hora de encontrar una alternativa. En un mercado de trabajo muy tensionado como es el caso de España, esto supone que los que se van lo hacen porque pueden, porque simplemente tu propuesta no les satisface (tras un período de cambios y de reflexión) y quieren buscar compañías o alternativas en las que poder plantearse otra forma de aportar valor y de trabajar con arreglo a otras contrapartidas.

Esas contrapartidas, por lo general, no suelen ser únicamente económicas. En muchos casos, lo que se está poniendo generalmente de manifiesto es que lo que buscan esos trabajadores es poder seguir trabajando como lo hicieron durante la pandemia, es decir, en unas condiciones de independencia y libertad mucho más interesantes, como ocurrió durante los meses de confinamiento cuando pasamos forzosamente a trabajar desde casa. Tras ese experimento, muchos trabajadores se plantearon no solo que podían seguir trabajando de esa manera, sino que además, el hacerlo les permitía una forma de organizarse mucho más interesante, sin dejar por ello de aportar valor a sus compañías.

Las compañías que lo entendieron, interpretaron un cambio desde la obsoleta cultura del control o de la vigilancia hacia la nueva cultura de la confianza: quiero trabajar en una compañía que confíe en mí, que tenga claro el valor que puedo aportar, y que me permita hacerlo en unas condiciones que me interesen. En muchos países, los puestos de trabajo que más están notando este cambio son los de desarrollo de software: con un mercado de trabajo generalmente dinámico e hiperactivo ante sí y con un tipo de tarea que permite perfectamente trabajar en modo distribuido (e incluso hacerlo de manera mejor y más productiva), muchos desarrolladores se plantean ahora cambiarse de compañía si aquella en la que trabajaban antes de la pandemia no les permite mantener su acuerdo de trabajo en modo distribuido, es decir, seguir trabajando desde su casa.

El fenómeno ocurre incluso en aquellas compañías que muchos consideran legendarias, las que suelen considerarse sitios en los que cualquier desarrollador querría trabajar, que ven como aquellos desarrolladores que se sienten perfectamente capaces de encontrar otro puesto de trabajo se van, mientras que los que se quedan en sus puestos sin rechistar son precisamente los mediocres, los que no tienen claro si podrían encontrar fácilmente otro puesto de trabajo. Esto genera el llamado «efecto Mar Muerto«, una progresiva concentración de personas con poco talento o con habilidades relativamente obsoletas, mientras el talento competitivo tiende a buscar otras compañías que les permitan trabajar en las condiciones que ellos demandan. Si en tu compañía ocurre algo así, estamos hablando por lo general de una espiral descendente muy peligrosa, de una fuga de cerebros que termina descapitalizando el pool intelectual de la compañía y su capacidad para mantenerse competitiva.

¿Cómo luchar contra la fuga de cerebros? Simplemente, asumiendo un cambio cultural que tienen todo el sentido del mundo cuando entendemos los cambios en el entorno. Si el entorno hace mucho más sencillo y más posible trabajar desde cualquier sitio, y muchos de tus trabajadores prefieren hacerlo así, tendrás que acomodarte a sus demandas si no quieres perderlo. Si además estás en un sector en el que la movilidad potencial de tus trabajadores es elevada, tendrás que apurar si no quieres que los mejores, los que pueden irse, se vayan, y te quedes precisamente con los que no quieren – o mejor, no pueden – plantearse la salida. Entender el cambio y pasar de esa cultura del control a una basada en la confianza es absolutamente fundamental.

Cuanto antes lo entendamos, antes seremos capaces de evitar el problema.


This article is also available in English on my Medium page, «People who want to work from home will find a way to do so, even if it means quitting their job»

21 comentarios

  • #001
    Alejandro J.Román - 8 diciembre 2021 - 10:24

    Un estado de situación presente y de apertura a grandes desafíos a la hora de plantearse un cambio. Que en mi caso es inevitable y en un constante ocuparme.

  • #002
    Gorki - 8 diciembre 2021 - 12:58

    No se lo que pasqrá en Norteamerica, ni siquiera se lo que pueda pasar en ESpaña. Pero en mi entorno familiar y de amigos, no sé absolutamente de nadie que haya cambiado de emprresa para poder teletrabajar.

    Tengo una sobrina informática que se ha cambiado de empresa, porque el trabajo y el entorno de trabajo que tenia, no la satisfacía y se ha ido a otra empresa en la que solo excepcionalmente, tiene que ir a la oficina.

    Esto, que lo considera una ventaja, no es lo que le ha hecho cambiarse de trabajo, porque en el otro lado que tambien tenoia una form. de trabajo flexible, aunque no tanto, se fue porque no estaba contenta.ni con eltrabajo que hacía ni con la compañía.

    No dudo que trabajar en casa no suponga un atractivo para muchos, pero al menos de momento no conozco a nadie que abandone un buen trabajo, para irse a un teletrabajo.

    • Miguel Durán - 8 diciembre 2021 - 23:43

      Yo te podría presentar a uno. Vive en Segovia, cerca de una parada del AVE, y le tocaba el trasiego diario porque la empresa le decía que era una exigencia del cliente. Tras Año y pico teletrabajando y viendo que lo del cliente era una excusa, en cuanto le han planteado volver a lo mismo, se ha buscado otro trabajo. Es un analista de Oracle y no le ha sido muy difícil encontrarlo.
      Si tu mundo es COBOL, ya pueden mimarte porque de eso hay demanda segura, pese a la de veces que lo han dado por muerto.
      Sin embargo dos amigos especializados en desarrollo para móviles, uno de ellos en los videojuegos, uno se ha ido a Dinamarca y el otro a Japón, porque aquí solo lograban entrevistas de esclavo barato.
      Hay gente que se ha especializado en una rama de Java en su día muy usado y desde hace 3 años destronado por Red Hat.
      Todos los cursos y certificados que sacaron ahora no son apreciados. Al menos aquí.

      • Gorki - 9 diciembre 2021 - 11:38

        En mi larga vida de profesional de la consultoría informática, (llevo 12 años jubilado) y cambiando de coiente una media de dos veses por año,. no ha habido que lo que sabia fuera aplicable para el siguiente cliente, o cambiaba el SO o cambiaba el lenguaje o cambiaba la forma de programar. He tenido que estudiar hasta el fin de mi carrera todos los días,
        Sin embargo si dominas un so y un lenguaje apreder otro es cosa de muy poco,

        De esto escribi en Quora y tuvo bastante buena acojida

        https://es.quora.com/Qu%C3%A9-es-algo-que-la-gente-no-termina-de-aprender

        • Lua - 9 diciembre 2021 - 14:12

          Oye Gorki…

          A ti te suena que es un puntero que apunta a un puntero que a su vez apunta a una matriz de punteros cuyo primer elemento apunta al último puntero que apunta a un puntero que apunta al primer puntero???

          Curiosidad… nomas… :P

          ps.- No busques en Google, que no creo que lo encuentres… XDD

          • Manolo - 9 diciembre 2021 - 15:06

            En PL/1 habia trabajado con punteros que apuntaban a direcciones de memoria, no a variables (Point to adress en lugar de point to point) y la verdad es que nunca entedí como funcionaban.

          • Lua - 9 diciembre 2021 - 17:49

            Un puntero, como su nombre indica, apunta a cualquier cosa, una variable, una matriz, una direccion de memoria… otro puntero…

            Ciertamente, los punteros son una ciencia (a mi me costo entenderlos), pero una vez sabidos… :P

          • Lua - 9 diciembre 2021 - 20:59

            Venga, lo ponemos mas facil… :P

            Puntero que apunta a puntero que apunta al primer puntero… XDDD

  • #009
    Manolo - 8 diciembre 2021 - 14:53

    A finales de los 80 en mi curro pasó eso, la gente marchaba a empresas que les ofrecían condiciones muy buenas. A algunos se nos ponía la cara de tonto.
    Al final pararon la sangría mejorando las condiciones, sueldo y vacaciones básicamente.

  • #010
    Lua - 8 diciembre 2021 - 15:49

    mientras que los que se quedan en sus puestos sin rechistar son precisamente los mediocres

    Un poco «fuerte» esta afirmacion, no?

    • Gorki - 9 diciembre 2021 - 21:13

      He conocido empresas que hacen una especie de seleccion de personal al revés, los mas útiles se escapan de la empresa en cunto encuentran una ocasión y los mas ineptos se quedan como lapas

      No solo eso, es como un monstruo que se retroalimenta y cada vez tardan menos en irse los útiles y es mas el tanto por ciento de inñutiles que quedan.hasta que llevan a la ruina a la empresa.

      • Lua - 10 diciembre 2021 - 10:05

        Yo he conocido a muy buenos profesionales, que no han sentido la necesidad de “huir” de su empresa. Sus responsabilidades iban acuerdo a su sueldo y sus otras ventajas (seguro médico, ayudas a la escuela de los niños, etc) eran bastante incentivo para quedarse. La promoción interna por merito hace el resto.

        También he conocido a muchos que supieron vender su “humo” en la entrevista y luego no daban palo al agua, no porque fueran vagos, sino porque no tenían puta idea de nada, pero supieron vender su película. Estos últimos tenían una insana tendencia a andarse de mesa en mesa, a la maquina del café, o alargar los desayunos todo lo máximo…

  • #013
    Mauricio - 8 diciembre 2021 - 18:47

    Enrique, durante esta pandemia hemos oído de gente del mundo tecnológico de Estados Unidos que ha decidido abandonar su trabajo para buscar uno que no solo sea mejor sino que también le permita teletrabajar. Se trata, sin duda, de personas que han sido favorecidas por el azar de una imprevista pandemia, como lo han sido, en mayor o menor medida, otros informáticos a lo largo y ancho del mundo, así como mucha gente vinculada al sector de la salud y del comercio electrónico.

    La mayoría de los habitantes de este planeta ha estado lejos de tener la misma suerte. En la misma Alemania la oferta de trabajo ha caído drásticamente en muchas áreas y en América Latina las cosas van muy mal. En el Ecuador, por ejemplo, hay el temor de que el país termine finalmente cayendo en las violentas redes del narcotráfico internacional, pues, por lo visto, la falta de trabajo ha impulsado a muchos a buscar ingresos en los negocios ilegales.

  • #014
    Victor - 8 diciembre 2021 - 23:57

    Aquí tienes a uno de los que se ha cambiado. Principalmente salario pero he tenido suerte con el resultado.

    Una de las cosas que más me sorprende en la es nueva es que la organización de la compañía no la llamaría plana. Si no islas densamente conectadas con un monton de autonomía.

    Tenemos oficinas pero no hay que ir. Pero te incentivan a ir: bonos para la comida, snacks, eventos etc. Lo mejor es que no hace falta que muchos vayan a la oficina para que que se creen nodos nuevos. Y sinceramente ¿que es mejor para la empresa? Que solo conozcas a tu equipo, o que conozcas a pocas personas de todos los equipos? Oficinas más pequeñas (ahorro) pero mejores (gasto) y a la vez más dinámicas. Brillante.

  • #015
    Javier Lux - 9 diciembre 2021 - 09:51

    Extremadamente interesante.

    Es triste decirlo pero me siento en cierta manera identificado. Incluyéndome yo mismo. En IT, después de un año trabajando junto a alguien salta a la vista quién es bueno y quien no. Da exactamente igual la formación/titulación que tenga. Si el tio es bueno, tanto programando como estructurando proyectos y definiendo objetos/procesos, y además ha trabajado en proyectos punteros, o está en un proyecto puntero, está cómodo y muy bien pagado, o se va haciéndote un siete del copón. Y además siempre encuentran buenos trabajos, porque eso se sabe.

  • #016
    PEDRO.P - 9 diciembre 2021 - 10:09

    Cuando se habla de mercado laboral tensionado por la falta de trabajadores, tristemente siento que España es una isla en el oceano, ya se que el sector tecnológico tiene una buena salud, pero en España no sobran los puestos de trabajo con buenas condiciones en general, ni en el tecnológico ni en cualquier otro servicio. Esa es la realidad.

    Y ojo que no hago una enmienda al artículo, ya que yo mismo he asistido a como las empresas renuncian, a ofrecer como ventaja, aquello que es gratis, las flexibilidad, expulsando a talento.

    Aún así el problema de España es el tejido industríal y empresarial menguante.

    • Javier Lux - 9 diciembre 2021 - 14:15

      Lo que pasa en muchas empresas aquí son poco realistas.

      Típica oferta del mercado español:

      Busco programador que pueda diseñar aplicaciones además de tratar con el cliente y venderle proyectos. Además debe de haber demostrado experiencia en:

      Backoffice: Con experiencia demostrable en programación batch Linux, herramientas ETL, Bases de datos, Blockchain, IA y Map-Reduce y ERP

      Front Office: Expèriencia demostrable en Javascript y Rust GTK2 y GTK3 ademas de Android y iOS

      Dominio de Excel VBA, MS project y Sharepoint

      Administracion de AWS y Azure

      Coche propio. Disponibilidad online 24*7*365

      Salario: 50.000 EUR

      Vete a tomar por culo, quieres a un tipo con un cerebro que no entra en tu oficina y le vas a pagar eso ?

      No me extraña que no encuentren candidatos así

      • Lua - 9 diciembre 2021 - 14:52

        No te olvides, de aquellas que para tecnologias y lenguajes con apenas dos años de existencia, te piden 5/10 de experiencia… XDDD

        Dad una vuelta por Infojobs… es un reir diario… :P

        • Javier Lux - 9 diciembre 2021 - 16:40

          A veces los anuncios de trabajo parecen los viejos anuncios de contactos:

          Hombre de 63 años busca pareja como máximo de 35, buen tipo y guapa. Simpática, siempre sonrriente, que sepa cocinar «nouvelle cuisinne» y además sea culta, cosmopolita y viajada.

          • Gorki - 9 diciembre 2021 - 17:49

            Y que me pueda mantener. Por pedir que no quede.

          • Lua - 9 diciembre 2021 - 17:49

            Ahora me siento puta… XDDD

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