El reset como oportunidad, mi columna en Invertia

IMAGE: Needpix.com (CC0)

Mi columna de esta semana en Invertia, la sección de economía de El Español, se titula «El reset como oportunidad«, y está encuadrada en una sección que se titula «50 opiniones para salir de la crisis«.

Nunca en la historia ha tenido la humanidad la oportunidad de observar qué ocurre cuando la actividad económica y productiva se detiene prácticamente en su totalidad y en una gran cantidad de países. Los efectos son, verdaderamente, para reflexionar. Los brutales descensos de los niveles de contaminación en las ciudades llevan a numerosos ciudadanos a interesarse por los vehículos eléctricos o por el teletrabajo como forma de llevar a cabo una transición que elimine lo peor de lo que nos trajo hasta aquí, las fuentes fundamentales de unos embotellamientos y de una contaminación que, como ahora sabemos gracias a los estudios, es la que nos hace más vulnerables.

La pandemia es el aviso más claro que la naturaleza ha podido enviarnos: si seguimos incrementando la presión sobre los ecosistemas y sobre las especies salvajes, tendremos cada vez más problemas. Debemos considerar el reset al que nos ha obligado la pandemia como una oportunidad para que nuestras ciudades cambien y no vuelvan a como estaban antes, para reorganizar nuestra economía en base a fuentes de energía limpias – aprovechando que los combustibles fósiles son ahora claramente deficitarios – y para asegurar que los planes de rescate que emprendamos tengan como protagonista a la sostenibilidad.

El mayor peligro ahora es la inercia: la pandemia ha puesto de manifiesto los errores y la insostenibilidad del sistema anterior, y si la recuperación nos lleva a volver a como estaba, significará que no hemos aprendido nada. El brutal desprecio del virus por las fronteras y la supina resistencia de los muchos gobernantes a aprender de la experiencia de otros países es la prueba de la interdependencia global y la imperiosa necesidad de estructuras de cooperación supranacionales, y aún así, veremos a algunos irresponsables estimular olas de nacionalismo que pretendan llevar a las sociedades temerosas a retirarse tras sus fronteras.

Ahora podemos transformar la economía y lograr, además, que esa transformación la haga más rentable. No despreciemos la oportunidad. Si no aprovechamos este parón para hacer un reset que de verdad valga la pena y corrija nuestro rumbo insostenible, estaremos cometiendo un grave error que nos tocará pagar más adelante.


The column is available in English in my Medium page, «In the post-pandemic world, let’s be realistic… and demand the impossible«


12 comentarios

  • #001
    Miguel - 15 abril 2020 - 17:53

    Hola
    No se, tendrás que explicarme, al menos a mi, un poco más el porque la pandemia ha puesto de manifiesto la insostenibilidad del sistema. A mi me parece un poco voluntarista, no se si intentas acercar el ascua a una sardina concreta, que por otra parte tu ya defendias antes de la pandemia, sin necesidad de que esa pandemia te abriera los ojos. Ojo, que si nos lo explicas un poco igual nos convences, no digo que no, solo digo que no lo veo.
    Por lo demás siempre te leo con interés.

  • #002
    Xaquín - 15 abril 2020 - 18:01

    Los virus no entienden de fronteras, y las moscas tampoco. Y como decía un personaje de una buena peli, no sabemos nada sobre la política de las moscas, aunque él no se refería en concreto al problema de las fronteras.. De hecho se supone (decía) que no pueden tener «política».

    Para eso (y para joderla) ya estamos los humanos. No se necesitan otros seres vivos.

    Los imperios tampoco tienen fronteras. Como las monarquias imperiales europeas. Y por eso nacieron los nacionalismos. Un avance en la política de «liberación de los pueblos». O eso decían.

    Luego vinieron las rebajas y las fronteras sirvieron tanto para que no entrara el imperialista de turno, como también para encerar sin libertades al propio pueblo antes «liberado».

    En fin, volviendo a la «nación terrestre», digamos que tenemos la posibilidad de reconstruir la política humana o de seguir haciendo encaje de bolillos, para ver si se muere un 10% o un 60%.

    Mientras tanto los tiburones económicos tomarán el sol en las islas desiertas, que aún les queden, aportando caritativas cantidades, para que les perdonen el resto de sus pecados.

    Ave sapiens, homo César.

  • #003
    pepelu - 15 abril 2020 - 18:44

    Sin que se sepa todavía el origen cierto del virus, decir en el artículo que «El Covid-19 es una enfermedad zoonótica, que proviene de animales con los que hemos entrado en contacto debido a la presión sobre los ecosistemas en los que vivían debido a la tala y la deforestación, y por esquemas de comercialización de animales salvajes tanto a nivel internacional, como a nivel local en los llamados “mercados húmedos”»., me parece un poco atrevido.
    Que el virus proviene de un animal parece demostrado, pero no que tenga ninguna relación con la deforestación, sino con el consumo de ciertas especies de animales en China y llevan siglos haciendolo.

  • #005
    piedrahita - 15 abril 2020 - 19:18

    ¿Cuántos papers y artículos se publican ahora sobre el asunto COVID19? ¿Más de cien al día?. En ellos puedes escuchar una opinión y la contraria sin esforzarte mucho en la búsqueda. Y sin ser ZP!!

    Cuando además se elige una opinión publicada, en eso tan desnotado en este blog, que se llama mass media (Prensa para la masa) y además es no científica tomándose como verdad verdadera, sucede algo parecido a cuando se tira una moneda al aire, tiene una probabilidad de acertar limitada a las reglas del juego en el que quieres participar.

    Hemos visto al doctor Simón, a la sazón responsable técnico, afirmar en un informe que algo era peligroso, después que ese algo no impedía ir a la mani( o al mitin de VOX aunque no lo dijera) así que Sr. Dans igual su fuente es tan fiable como nuestros asesores y sus opiniones Sigamos jugando a la ruleta rusa o a «Simón dice»

    Buenas noches y buena suerte.
    Lo siento pero no me va la ludopatía.

    • Enrique Dans - 15 abril 2020 - 19:29

      Si lo llamas ludopatía, será porque seguramente no te da el magín para elegir con criterio. A mí sí. Para eso he estudiado. Yo no escojo mis enlaces al azar, como tú aparentemente crees. Se llama content curation, y le dedico mucho tiempo todos los días. De hecho, más que a escribir el artículo. Te podrás fiar o no de mi criterio o no, en eso, tú decides. Pero criterio hay, eso te lo aseguro. Y por supuesto, si decides que mi criterio no vale la pena ni es fiable en absoluto, o que tengo tantas posibilidades de acertar como un mono tirando dardos a una pared, no sé qué diablos haces aquí leyendo…

  • #007
    Gorki - 15 abril 2020 - 21:34

    La pandemia es el aviso más claro que la naturaleza ha podido enviarnos: si seguimos incrementando la presión sobre los ecosistemas y sobre las especies salvajes, tendremos cada vez más problemas.

    Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid.

    ¿Donde ha escrito esta pandemia que tenga ese aviso?

    Las anteriores pandemias que ha sufrido la humanidad, ¿Tambien eran «el aviso más claro que la naturaleza ha podido enviarnos: si seguimos incrementando la presión sobre los ecosistemas y sobre las especies salvajes»,

    ¿Qué pecado contra la maturaleza habian cometido los mativos de Anerica que casi fueron exterminados por las epidemias?

    Al final, terminaremos creyendo que las pandemias, los terremotos , las sequías, las inundaciones y ¡OJO!. las langostas de África, son castigos divinos de la Diosa Natuuralezas y que Greta Thunberg, lleva debajo del brazo, los 10 mandamientos del la NRVD (Nueva Rreligión.Verdadera y Definitiva)

    • Javier - 15 abril 2020 - 22:45

      ¿Donde ha escrito esta pandemia que tenga ese aviso?

      Gorki, se llama Pensamiento sistémico, y está relacionado con la dinámica de sistemas, los sistema complejos y los sistemas dinámicos.

      Si todo se pensara de forma lineal, no, la pandemia no tiene relación con el calentamiento global, ni con el capitalismo, ni con la crueldad humana. Esas son cosas sin relación entre sí con la actual pandemia.

      No. Solo se trataba de que había que hervir dos minutos más al maldito murciélago. Y ya, tanto problema.

      Ayer mismo manifestabas tu sorpresa:

      Lo que no llego a entender, es cómo quien se lo ha mandado, que es una persona con razonable sentido común, no se ha dado cuenta que era absolutamente inverosímil.

      Lo mismo me pasa hoy contigo: Oye, los distintos expertos (Biólogos, Climatólogos, Urbanistas, Economistas… elige tu la especialidad) venían avisando cada uno en su campo que hay problemas serios y no hay indicios de que se fueran a reducir.

      ¿Y tu quieres un aviso por escrito?

      ¿Pretendes igualar pandemias de otras épocas y contextos sociales y económicos con la actual, y como no coinciden entonces no hay relación directa?

      Solo hay que conectar los puntos Gorki.

      Peter Senge, autor de «La quinta disciplina» lo dice muy claramente (perdón por lo extenso del texto):

      Realizamos un acto y vemos las consecuencias de ese acto; luego realizamos un acto nuevo y diferente.

      ¿Pero qué ocurre cuando ya no vemos las consecuencias de nuestros actos?

      ¿Qué sucede si las consecuencias primarias de nuestros actos están en el futuro distante o en una parte distante del sistema más amplio dentro del cual operamos?

      Cada uno de nosotros posee un «horizonte de aprendizaje», una anchura de visión en el tiempo y el espacio, dentro del cual evaluamos nuestra eficacia.

      Cuando nuestros actos tienen consecuencias que trascienden el horizonte de aprendizaje, se vuelve imposible aprender de la experiencia directa.

      Se aprende mejor de la experiencia, pero nunca experimentamos directamente las consecuencias de muchas de nuestras decisiones más importantes. .

      Solo hay que conectar los puntos Gorki.

      • Gorki - 16 abril 2020 - 00:33

        Solo hay que conectar los puntos Gorki.

        Tienes razón entre tu y Peter Senge, experto en la noción de organización como un sistema. Me habeis convencido,

        Lo que es no habere leido el libro adecuado. Si lo hubieran leido los nativos de America, se habrian salvado de su destrucción.

  • #010
    Luis Alberto Díaz Martínez - 15 abril 2020 - 21:43

    Nuestra Realidad mutó para siempre. Ya tenemos que sopesarla, escudriñarla y apreciarla como nuestro nuevo mayor bien. Solo en la medida en que la conozcamos de verdad, podremos degustarla a fondo y en equilibrio. Cada quien también podrá decidir mantenerse igual que antes.
    Por primera vez en los cinco continentes y en seis mil años de civilización, los seres humanos hemos tenido que aislarnos en cuarentena por una pandemia global: un llamado de la Naturaleza para respetarla, armonizar nuestro comportamiento social y detener la inminente autoextinción.

    • Gorki - 16 abril 2020 - 00:46

      ¡Jope ! Pues no vengo yo diciendo que ni cambio climático. ni leches, que simplemente somos muchos y que o reducimos el número de habitantes o que la Natr uraleza se encargaría de ello.

      Repito lo que dije en octubre https://www.enriquedans.com/2018/10/el-gran-problema-y-los-pequenos-gestos.html

      «El problema es que el ser humano se ha transformado en una plaga mundial de 7.000,000.000 de individuos. Hasta el siglo XIX, la naturaleza con sus cuatro
      tradicionales armas, la mortalidad infantil, el hambre, las pestes y las guerras. conseguía , mas o menos, mantener el número de seres humanos dentro de algo aceptable para el planeta.

      Pero a partir del siglo XX, se ha vencido a las epidemias y a la mortalidad infantil, se ha reducido mucho las hambrunas, mediante la introducción indiscriminada de la agricultura intensiva y parecer, se han reducido los frentes de guerra, Sigue habiendo guerras, pero en escenarios geográfiicamente muy limitados. Nada que ver las guerras de hoy en Oriente Medio, con la guerra de los Cien Años de la Europa medieval.

      En consecuencia, el número de humanos se ha disparado exponencialmente y sigue creciendo. Para contrarrestarlo, se ha limitado la natalidad en los países mas ricos, y si bien ha impedido en ellos un crecimiento exponencial, ha sido al precio de un envejecimiento brutal de la población que no sabemos muy bien como vamos a hacer frente en un futuro próximo.

      El problema para el que nadie tiene solución, es como reducir la poblacion mundial de 7.000.000.000 de personas a la mitad, sin utilizar los recursos de las pestes o el hambre y seguir teniendo en esta poblacion reducida una razonable pirámide de edades»
      .

      Pues bueno, tenemos el coronavirus, que va a matar pocos, después vendrá la pobreza, que tanbien mata mucho pero de forma silenciosa, y además no podremos ayudar a 30.000.000 de africanos, que pasarán hambre.. porquer tienen una plaga de langosta. chales una my ningun pais rico podra echarlos unba mano, porque todos tendrán muchos problemas en su propio pais.

  • #012
    Luis Alberto Díaz Martínez - 15 abril 2020 - 21:45

    ¿Nuevo inicio? 2020 bisiesto y por segunda vez la Historia se divide en dos. Primero, un hecho crucial vuelto Creencia ecuménica y divina, vía Imperio Romano y sus sucesores: AC/DC. Segundo, una Evidencia rotunda y por completo global, pandémica y de valoración científica: ACV/DCV. Curiosa simetría.

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