El tiempo de pantalla como métrica cambiante

IMAGE: Screens (CC0)

En 2019, por primera vez, los adultos estadounidenses pasarán más tiempo delante de la pantalla de sus dispositivos móviles que delante de la de la televisión, un cálculo que se cifra en 3:43 horas frente a 3:35, con tendencia marcadamente ascendente en el primer caso y descendente en el segundo.

¿Cuál es el significado de esa tendencia? ¿Es algo intrínsecamente positivo o negativo? ¿O indiferente? Mientras muchos rápidamente pretenderán lanzarse a hacer análisis apocalípticos sobre lo malos que son los smartphones y lo supuestamente adictos que somos a ellos, conviene pensar en el significado del tiempo de pantalla como métrica en los tiempos que vivimos, y en la interpretación que hacemos de ella. Mientras la televisión sigue evocando un consumo de contenidos con un patrón inequívocamente unilateral y pasivo, el resto de las pantallas, particularmente ordenadores y smartphones, y posiblemente en menor medida tablets, responden a un patrón marcadamente bilateral e interactivo, con todo lo que ello conlleva de diferencias en su interpretación.

Por alguna razón, la idea de la «adicción a la televisión», que hace décadas se consideraba una tendencia preocupante y llevó incluso a acuñar el concepto del «couch potato« asociado a personas que pasaban mucho tiempo sentados o tumbados en el sofá viendo la televisión y sin hacer prácticamente ningún ejercicio físico, ha perdido casi completamente su protagonismo como generador de preocupación, y ha sido claramente sustituido por esa supuesta figura de la adicción al smartphone, y lo ha sido, además, de una manera profundamente burda y simplista, como si todo el tiempo que pasamos delante de una pantalla correspondiese a un mismo tipo de patrón.

La gran verdad es que evaluar ese tipo de tendencias analizando una variable como el tiempo de pantalla es irrelevante. Obviamente, el tiempo de pantalla es una métrica cambiante, y con una complejidad mucho mayor de lo que tendemos a pensar. De hecho, los estudiosos de la materia tienden a pensar que el valor del tiempo de pantalla como métrica, tomado de los parámetros de uso de un dispositivo, tiene un valor ínfimo, mientras que lo que realmente puede contribuir al estudio de los patrones de consumo de una persona es el llamado screenome, término formado a partir de las palabras «pantalla» y «genoma», que supone recoger y analizar toda la secuencia de pantallas que una persona consume en un dispositivo, y obtener los patrones que se derivan de ese consumo. El análisis de ese tipo de datos permite entender qué tipo de uso hace una persona de un dispositivo, cómo se establece su relación con él, qué hábitos conllevan un consumo pasivo y unidireccional frente a uno bidireccional y activo, detectar cualquier tipo de comportamientos obsesivos o compulsivos y ser capaz de determinar su nivel de criticidad correlacionando esos patrones con diagnósticos de problemas como la depresión.

De nuevo, se refleja claramente cómo la idea de si un determinado nivel de uso de un smartphone es bueno o malo resulta profundamente burda y simplista. No existe un nivel de consumo saludable frente a otro supuestamente peligroso u obsesivo: existen patrones complejos que se corresponden con muchos tipos de uso, y que revelan cuestiones completamente distintas de cada persona. No es lo mismo pasar mucho tiempo hablando activamente con otras personas, que dedicarse a hacer scroll a través de una enorme sucesión de fotografías en Instagram. Un smartphone o un ordenador son dispositivos enormemente versátiles, lo que implica que dentro de la métrica «tiempo de pantalla» estamos introduciendo una enorme cantidad de comportamientos completamente heterogéneos y que no tiene sentido considerar como parte de un mismo análisis. Una persona puede, de manera prácticamente ininterrumpida, desbloquear su smartphone para hablar con alguien, después usarlo para tomar unas fotografías, recurrir a un mapa para saber llegar a un sitio, consultar un correo o un mensaje y echar un vistazo a los movimientos de su cuenta bancaria, y todo ello quedaría absurdamente considerado como «tiempo de pantalla» y analizado de manera absurda.

Saber cuánto tiempo pasa una persona delante de la pantalla no es significativo, en ningún dispositivo. Para tratar de obtener algún análisis relevante será necesario saber a qué se dedican cuando están delante de esa pantalla, en qué emplean realmente su tiempo y si eso corresponde a un uso perfectamente normal o refleja algún tipo de comportamiento disfuncional. Si hablamos de nuestros hijos, algo que se evalúa no necesariamente con programas que monitorizan todo lo que hacen y que no se corrige simplemente restringiendo el tiempo de uso del dispositivo en cuestión, sino con algo mucho más sencillo y recomendable: comunicación.


This post is also available in English on my Medium page, «Does screen time tell us anything useful?«


14 comentarios

  • #001
    menestro - 6 junio 2019 - 14:05

    Enrique, sinceramente, muchas veces no sé de qué hablas, bueno sí, pero tu abordaje es ‘peculiar’.

    Se ha sustituido el dispositivo con el que consumían los contenidos. Ahora vemos Juego de Tronos en el móvil.

    También se ha producido la evolución de los hábitos de consumo, tanto como del formato, y la sustitución de los proveedores de esos contenidos, debido a la falta de una oferta competitiva por los canales tradicionales.

    Y, más aún, su incapacidad de jugar en ese nuevo mercado, tanto por falta de recursos y capacidad para incorporar talento, como por desconocimiento de esa nueva cultura de consumo. – Kodak -.

    Sólo hay que comparar el despliegue y servicio de las plataformas OTT internacionales con las ‘páginas web’ infumables de las Tv.

    ¿Alguna vez has visto a Netflix – o CNN – tuitear como locos un hashtag ‘catchy’ para difundir sus contenidos en las redes sociales? No.

    Y sin embargo, ofrece series en 4K en los dispositivos móviles.

    Ale, sin enlaces.

  • #002
    Gorki - 6 junio 2019 - 14:08

    Conforme con lo que dices, Sin embargo las cifras estadísticas, yo ni me las creo, pues me tendrían que explicar con detalla como las consiguen, ni creo que tengan mucho sentido,

    Por ejemplo, una hermana mía que es viuda, cuando está en su casa, pone la televisión para, en cierto sentido, sentirse acompañada. Nada tiene que ver con el «couch potato«, pues frecuentemente no está ni en el mismo cuarto que la televisión.

    ¿Como recogen ese comportamiento, que me parece bastante común, (mi mujer lo hace con la radio), las estadísticas?.- Nunca he visto un apartado que diga tantas horas de tv encendida sin espectadores.

    Análogamente, cada vez veo mas gente en la calle y en transportes públicos, que llevan los pinganillos del sjmartphone, pero este va en un bolsillo, no se si oyen música, un podcast, un audio libro, o hablan con un interlocutor, pero tampoco veo un apartado que diga, Smartphone encendido, pero no miran pantalla.

    Lo que si creo, es que el tiempo real de uso en Internet es mucho mas activo que el tiempo frente a un televisor clásico, Ahora bien,, si esa actividad es de alto nivel intelectual, como enterarse de la actualidad, o de bajo nivle, como matar marcianitos o mandar compulsivamente whatsapp, no tengo ni idea. Probablemente dependa del intelecto de cada uno, como pasaba entre los que veían la televisión.

    Por otra parte no veo nada extraño que una persona que ha tenido una jornada extenuante de trabajo y familia, precise de un tiempo zombi delante de una televisión, o de un juego de plataformas. Cada cual se relaja como mejor le parece.

  • #003
    LOS PANCHOS - 6 junio 2019 - 18:01

    ¿Y en que se basa esa estadística? ¿Qué estudio lo avala?¿Cual es el número de elementos de la muestra? ¿Cómo se recogen los datos?

    Asumiendo que ese dato exista, ¿Para que sirve? Cuando tu mismo dices que ese dato no es relevante en el párrafo final, ¿Para que sirve tu artículo?¿para que sirve mi comentario sobre un artículo basado en un informe irrelevante?

    Pues eso, que buen día hace hoy. Parece que este fresquito no durará, ¿y Hazard ya lo ha fichado el Madrid? No sé estaba viendo Sálvame y leyendo esto de los blogs que cada vez es más dificil encontrar algo interesante en la tele y en el móvil

    Bueno voy a leer un libro, que si no incremento las estadísticas de los chorras que están vagueando

    • Enrique Dans - 6 junio 2019 - 20:19

      Tu sabrás lo que haces con tu tiempo. Pero mi artículo viene a demostrar cosas que llevo tiempo diciendo, como que monitorizar el tiempo de pantalla de los niños no tiene sentido, y que lo que hay que hacer es buscar métodos basados en el interés y la confianza de los padres para saber a qué cosas se dedica ese tiempo de pantalla y ser capaces de entender si puede ser algo inocuo, positivo, o un potencial indicador de algún tipo de problema. No hay nada peor que una métrica simplista. Pero vamos, que si según tú no sirve para nada, tú mismo…

      • menestro - 7 junio 2019 - 13:08

        El estudio es sobre el consumo de los adultos, Enrique. No demuestra nada.

        Y el desarrollo de los niños responde a otras necesidades.

        El uso de las apps actuales no les será de ninguna utilidad, ni supone el despliegue de ninguna habilidad útil para su desempeño en el futuro.

        Bastantes analfabetos digitalizados hay ya presumiendo de «conocimientos de Internet y redes sociales», como antes se presumía de «Ofimática».

        • Enrique Dans - 7 junio 2019 - 13:39

          Ya. «Los niños, esos extraterrestres»…

  • #007
    Gorki - 6 junio 2019 - 21:06

    Quizá lo que deseabas comunicar, que controlar el tiempo que pasan nuestros hijos delante del smartfone es irrelevante, que lo importante es saber, que hacen esos hijos en esos aparatos, ha pasado desapercibido.

    El párrafo dedicado a los hijos, es el último punto y aparte. A mi, quizá porque ya no tengo hijos en edad de para controlar, también se me había pasado por alto y como. LOS PANCHOS , se me ha ido la atención sobre la escasa fiabilidad que tienen las métricas de audiencia, pues actualmente una casa tiene varias pantallas y ya no se sabe si son televisiones, camáras de video camufladas, video teléfonos, pantallas de proyección, o periféricos de un ordenador, y enfrente de ellas hay un grupo de personas viendo un partido, uno solo en su cuarto o nadie porque es una pantalla de vigilancia de el portal o la que se coloca encima de la nevera en la cocina.

    Opino como tu, que las métricas actuales no son útiles para un estudio de comportamiento de la audiencia, pero es que además , salvo que me explique, tampoco creo que sean datos fiables de la audiencia que realmente tiene un canal. Si en este momento tengo abierttas unas ocho solapas, ¿Como contabilizan la audiencia que tien la solapa abierta a Gmail.?

  • #008
    Los panchos - 6 junio 2019 - 21:34

    Gorki
    La «encuesta» del grupo aleman que presenta Enrique es un estudio de marketing, y cualquier dato que publica al modo Nielsen tiene un fin comercial. Basar cualquier juicio supuestamente académico sobre tiempo infantil dedicado al móvil es hacer un circunloquio para arrimar el ascua a la sardina que defiende Enrique, y hacerlo en esos datos pues no es muy de recibo, y no lo hace, y eso no se lo discuto. De hecho no he querido entrar en ello. Es su opinión no basada en los datos que referencia.
    Por tanto para que valen esos datos, para poco. Y mostrar que su opinion no se basa en ellos pues tampoco va mucho allá … Ya nos simos cuenta al leer el artículo…

    • Gorki - 6 junio 2019 - 23:33

      Creo que se puede discrepar de lo que dice Dans, (yo lo hago con cierta frecuencia) , pero en cambio opino que hay formas de hacerlo.que no son de recibo.

      Quizá sea viejo y haya recibido un tipo de educación que está obsoleta, pero me parece que decir » ¿Para que sirve tu artículo?¿para que sirve mi comentario sobre un artículo basado en un informe irrelevante?» , es inadecuadamente agresivo, estoy seguro que hay formas mas amables de decirlo .

      • LOS PANCHOS - 7 junio 2019 - 11:16

        Gorki
        Agradezco tu tono amable en la crítica sobre el estilo de mi comentario. Siento que no estés de acuerdo en la forma y por eso aprecio mucho más que no disientas en el fondo de la cuestión. Aunque creo que lo viene a continuación no cambie tu opinión, espero que matice algo lo que llamas agresividad y que entiendo que es cultura, entendiendo como tal como el mecanismo o filtro de adaptación que las personas utilizamos en la comunicación.

        No voy a hacer un glosario de los adjetivos y formas adyacentes al insulto que algunas veces nuestro querido Enrique utiliza con sus comentaristas. El utilizar frases como las que citas, sobre la utilidad del artículo (o mi mismo comentario) simplemente minosvalora la fuente sobre la que está basado el artículo.

        En otras palabras, si aceptamos que me estoy enfrentando a una dificultad, en este caso, la de contradecir una opinión en casa ajena, entiendo que en esa acepción (séptima y octava de la RAE si se puede considerar agresiva, pero en ningún modo en la acepción de faltar al respeto a Enrique, que por mucha adaptación cultural a su estilo, jamás es mi intención criticar sus opiniones, pero si los juicios de valor basados en bases endebles.

        Espero que cuando veas agresividad en mi mismo, Enrique o cualquier comentarista, tus valores en las formas sigan luciendo , y no sigan en la oscuridad de tus pensamientos.

  • #011
    Xaquín - 7 junio 2019 - 02:10

    De alguna forma viene a ser muy parecido a usar como medida el tiempo que pasa un alumno frente a un libro, para en teoría decir que “estuvo estudiando toda la tarde”, Y puede incluso que estuviera todo el tiempo mirando para el libro (y hasta pasando hojas, por si la madre está “escuchando” cerca). Todos sabemos la desenfrenada pasión que conlleva una buena hora pensando en las acrobacias moscosas.

    Y dese luego que debo ser algo obtuso, por pensar que hay dos o tres párrafos, que resumen perfectamente el sentido que se le quiere dar a la denuncia de un mal uso de la tonta métrica de uso de pantalla.

    Laineficiencia cultural en el uso de libros o pantallas, nos viene a indicar, por enésima vez, la necesidad imperiosa de favorecer más lo que podemos llamar el entrenamiento neuronal. Algo prohibitivo en un sistema educativo domesticador como es el español. A fin de cuentas, sin una educación que conforme buenos educadores, será imposible una buena comunicación.

    • Xaquín - 7 junio 2019 - 02:15

      En el “buenos educadores” final, debería decir “buenos comunicadores”.

  • #013
    Pedro Torres Asdrubal - 7 junio 2019 - 12:00

    ¡Qué decepción!

    Pensaba que era un artículo sobre el nuevo soporte de pantallas de Apple, por el módico precio de 999 USD.

    xD

Dejar un Comentario

Los comentarios están cerrados