Ecosistemas colaterales: cazando pájaros

Bird scooterAlgunos artículos recientes describen el ecosistema económico que ha surgido en torno a la carga de los miles de patinetes eléctricos que han proliferado en las calles de muchas ciudades norteamericanas, sobre todo derivados de las prácticas de Bird, la compañía dirigida por el ex-Uber Travis VanderZanden, que además de ser la pionera del modelo, la única pure player y la de mayor visibilidad en cuanto a cobertura mediática, es la que más está tratando de provocar la reflexión sobre la regulación de su modelo de uso y el conjunto de prácticas necesarias para encuadrarlo de manera sostenible en las ciudades en las que opera.

El conjunto de normas que propone Bird, y que han incorporado también otros competidores como Lime, que gestiona tanto patinetes como bicicletas, pasa por la recogida nocturna de los patinetes para su carga y revisión. Para ello, ambas compañías cuentan con modelos en los que retribuyen a personas (Chargers, en el caso de Bird, o Juicers, en el de Lime) por salir por las noches con sus vehículos a localizar patinetes mediante la app, transportarlos a sus casas, cargar sus baterías, y volver a dejarlos a la mañana siguiente en sitios designados para rebalancear la disponibilidad, ordenados, estacionados correctamente y listos para su uso. El modelo puede incluir también empleados de la compañía con furgonetas que completan la actividad y recogen igualmente algunos patinetes (unos 40 en el caso de Lime), o depender mayoritariamente de colaboradores externos.

Los patinetes tienen un valor determinado en función de su estado de carga, y la tarea de localizarlos y hacerse con ellos ha sido comparada ya por algunos a las dinámicas de Pokemon Go: una persona puede, en función del número de patinetes que consiga localizar y cargar, puede ganar en una noche algunos cientos de dólares, a cambio de una cantidad de electricidad bastante escasa y, sobre todo, del trabajo necesario para recogerlos y devolverlos. Así, se ha creado un ecosistema de generación de ingresos, los «cazadores de pájaros» o bird hunters, que a partir de algunos artículos que describen jornadas que les permiten obtener entre unos $100 hasta cerca de $600 en una buena noche, han ido popularizando la actividad para convertirla en un creciente fenómeno social entre un público mayoritariamente joven en búsqueda de ingresos adicionales.

En torno a la carga de los scooters surgen todo tipo de actividades, regulares o irregulares: los chargers o juicers reciben los ingresos correspondientes a los patinetes a los que dan servicio a través de depósitos directos en sus cuentas bancarias, pero además, compiten entre ellos para hacerse con los mejores patinetes, se exponen a ser atracados cuando van a por patinetes dejados como señuelos en zonas solitarias, o se encuentran con personas que tratan de localizar esos mismos patinetes para, en lugar de cargarlos y devolverlos a la calle, dedicarse a actividades delictivas como desarmarlos y venderlos por piezas. Así, empezamos a encontrar consejos extraoficiales para «cazadores de pájaros», como el no acudir a determinados barrios o localizaciones peligrosas, llevar armas defensivas como tasers o sprays de pimienta, o agruparse para «salir a cazar pájaros» juntos y repartirse las ganancias.

De nuevo, una modalidad de la llamada sharing economy basada en la explotación de los ciclos o recursos ociosos: personas dispuestas a invertir tiempo, algo de esfuerzo, sus vehículos y una pequeña cantidad de electricidad a cambio de unos ingresos. Es muy posible que las compañías procedan, tras haber popularizado la actividad, a ajustar las tarifas que ofrecen a esos colaboradores externos para regular sus necesidades y sus costes, pero aún así, muchos chargers afirman que, dentro de unos límites razonables e incluso si los incentivos se redujesen a la mitad, la actividad seguiría resultando interesante y provista, además, de un componente lúdico o incluso cívico.

La viabilidad de la explotación de los patinetes en las ciudades ha sido criticada, comparada con los monumentales excesos de las compañías de bicicletas dockless en China, o ridiculizada aludiendo al supuesto carácter «de juguete» de estos vehículos, pero su uso parece estar creciendo cada vez más en cada vez más ciudades, el dinero en forma de rondas adicionales de financiación hacia estas compañías sigue fluyendo, y este tipo de tácticas de implicación de terceros para tareas como la carga de las baterías podrían suponer un cierto alivio parcial para algunos de los problemas habitualmente citados como más preocupantes. La clave, llegados a este punto, está en el nivel de uso diario que debe mantener un patinete, a razón de un dólar por viaje más quince centavos por minuto, para que la compañía, pagando a personas que lo recogen y cargan por las noches y haciendo frente a los costes derivados de robos y mantenimiento, sea aún capaz de obtener un beneficio. Pero eso de ganar dinero con la actividad, como hemos visto tantas veces en este tipo de modelos, no es el problema ahora, sino una preocupación posterior supeditada al crecimiento.

 

 

 

This article was also published in English at Forbes, “Electric scooters and collateral ecosystems: Bird hunters»

 

22 comentarios

  • #001
    Gorki - 21 mayo 2018 - 12:12

    ¿No estamos llevando a niveles ridiculos la economía colaborativa, ? Entiendo lo que es compartir el uso de una vivienda, de un automóvil o de una moto, pues esos son nos solo objetos caros, sino que o son bienes inmuebles, por tanto no los puedes disfrutar ahí donde tu los necesites, o bien son muebles, pero por el contrario noson lo suficiente voluminosos para no ser fácil guardarlos en tu hogar.

    ¿Pero cuanto ocupa un patinete eléctrico plegable?.¿No sería mejor esforzarse por hacerlos mas baratos y menos voluminosos y ligeros y que cada uno guarde su patinete en su casa o en la oficina, como guarda el impermeable o el paraguas?,

    Entiendo compartir objetos caros e incómodos de guardar como una barca de recreo, o de muy poco uso, como puede ser algunos tipos de máquinas de bricolaje, pero no objetos que en principio vamos a utilizar todos los días y que se pueden tener en un hogar perfectamente.

    • Enrique Dans - 21 mayo 2018 - 12:14

      ¿De verdad prefieres tener que cargar con un patinete eléctrico por el mundo cuando podrías usar el primero que ves por la calle y dejarlo donde te dé la gana por cuatro perras? Yo no.

      • Gorki - 21 mayo 2018 - 14:20

        Lo mismo podrías preguntarte para el abrigo, a gabardina, los guantes, ,Para que cargar con ello. ¿no se mas cómodo alquilarlo un o cualquiera cundo tengas frío?

        Yo he visto un patinete que se dobla y se guarda en una bolsa y se lleva colgado del hombro ¿Es tan incómodo trasportarlo?

        • Anonimo - 22 mayo 2018 - 15:15

          Sí.

    • Krigan - 22 mayo 2018 - 00:48

      Como ya he comentado en alguna ocasión, en Valencia están proliferando los patinetes eléctricos, pero aquí la gente los compra, no los alquila, y en consecuencia no ves ninguno abandonado en la calle.

      La cuestión es: ¿qué es mejor en el caso de los patinetes eléctricos? ¿La compra o el alquiler? Para empezar, el sistema del alquiler tiene que ser como mínimo tolerado por el ayuntamiento correspondiente, porque como los municipales se pongan a recolectar patinetes abandonados, que para eso no necesitan ni grúa, el negocio se iría a pique en dos días.

      Conviene recordar que un vehículo (cualquier vehículo) no se puede dejar aparcado en cualquier sitio ni de cualquier manera. Estamos hablando del uso del espacio público, y ahí el que manda es el ayuntamiento, que tomará su decisión en gran medida dependiendo de cómo vean el tema sus vecinos y votantes.

      Por tanto, con los patinetes, ¿qué es mejor? ¿Compra o alquiler? Como dices, son baratos, plegables, no pesan mucho, y ocupan menos. Por otro lado, en el sistema del alquiler no tienes que cargar con el cacharro.

      Además del patinete eléctrico, en Valencia también han tenido éxito las bicis de Valenbisi (con «s», no «c»), sistema promovido por el propio ayuntamiento y prestado por una empresa privada, con bicis en alquiler, pero que no son abandonadas, sino que quedan enganchadas en unos puntos especiales de aparcamiento. No son eléctricas, pero es obvio que los puntos de enganche podrían ser también de recarga.

      Algo así podría aplicarse a los patinetes eléctricos, evitándose los inconvenientes del Salvaje Oeste de Bird, que están a punto de causar que San Francisco y otros municipios usen su irrebatible poder legal para cargarse a Bird y similares.

      ¿Qué es mejor? ¿Comprarte una bici plegable o usar Valenbisi? ¿Comprarte un patinete eléctrico o usar una Valenbisi de los patinetes?

      Mirando un poco al futuro, algunos modelos de patinetes para niños son en realidad triciclos estrechos (llevan 2 ruedas y no solo una en uno de los estremos). Por ser un triciclo es estable, se mantiene solo de pie. Un aparato así, con tecnología similar a la del robotaxi, podría ir solo a los puntos de enganche/recarga tras dejar al último cliente, y también desengancharse solo e ir adonde esté el siguiente cliente que lo pida con el móvil.

      Estamos viendo tan solo la punta del iceberg.

  • #006
    Severino Fernandez - 21 mayo 2018 - 12:15

    Enrique

    Te propongo un titular alternativo

    Cazando Pájaros: Innovación cero, degradando el mercado laboral.

    Recuerdo una película en la que se nos colaba su mensaje, y nos mostraba que un niño de unos 10 años vendía limonada a un dólar a la puerta de su bonita casa unifamiliar con jardín sin vallas.

    Era una oda al esfuerzo y como hay que inculcar desde pequeño las reglas del capitalismo bonachón sin «dolor». El mensaje estaba bien diseñado, de hecho el resto de la película no se ha quedado grabado en la memoria.

    Ahora hay una diferencia perversa:

    El niño de la película ha crecido, y se convierte en un NO asalariado que trabaja en la economía sumergida «en sus recursos ociosos» es decir horas nocturnas, en eso que la neoverdad le llama «sharing economy». Me dirán los partidarios: «Nadie les obliga y que al fin y al cabo el germen de una sociedad de mercado es este tipo de iniciativas» OK sin problemas, pero la crítica va más por no llamar a las cosas por su nombre: «economía sumergida y degradación del mercado laboral» y no como ahora se visibiliza mediáticamente en los blogs sin crítica alguna.

    La realidad del cuento también admite otro enfoque diametralmente opuesto:

    a) Alguien monta una empresa de servicios (alquiler de un producto)
    y no le salen los números si paga sueldos decentes a las personas
    b) El precio claro, te lo fija el mercado, por tanto tu estructura de costes tiene que ser compatible con tu «idea de negocio» para que funcione.

    Fijas una estrategia:

    – Plantilla al mínimo
    – Automatizas al máximo los procesos
    – El cliente hace parte del trabajo (app)
    – Al ser la actividad muy nueva, no pides permiso a tu ayuntamiento, mejor no preguntar para no dar pistas…
    – Producto tiene que ser muy barato. Solución: los compras en China. Lo de «America first» es válido hasta que lo que interesa es ganar pasta…
    – Externalizas el mantenimiento

    Te despreocupa si esa externalización es alegal o no.
    Desconozco el caso de EEUU en profundidad, en España estariamos hablando como mínimo «de los falsos autónomos»

    Para que la estrategia de la externalización funcione tienes que mover el mercado ya que cuando hay pocos cargadores, el precio por unidad reparada no baja. Pero si hay muchos cargadores la demanda será alta, y la oferta bajará siendo en definitiva lo que busca el empresario: bajar costes, intentan pagar lo mínimo por unidad cargada.

    En definitiva «degradar el mercado laboral de tu ciudad». Como siempre hay un porcentaje de población que necesitará acudir a este tipo de ingresos para sobrevivir. Mientras la startup tendrá unos beneficios a costa de la marginalidad, y no dejará de ser empresas sanguijüelas (leech-startups).

    Pero vamos a llamarlo sharing economy y contar un cuento de color rosa…

    • Enrique - 21 mayo 2018 - 13:10

      Hemos visto impasibles durante años la cesión ilegal de trabajadores, incluso en la administración pública, escondidos detrás de externalizaciones para beneficio de grandes consultoras o «ingenierías».

      ¿De verdad crees que ahora alguien se va a escandalizar por esto?
      Al final el trabajo poco cualificado se va a extinguir, todo el mundo lo sabe. Algunos se aprovechan y otros intentar sobrevivir el tiempo que puedan.

    • Gorki - 21 mayo 2018 - 15:50

      Comprendo que te preocupe que haya personas que tengan que recurrir a recoger patinetes de noche para poder sobrevivir. Pero pienso, que la solución a este problema no puede consistir en prohibir todos los trabajos que estas personas están haciendo.

      Es como acabar con la mendicidad, por el procedimiento de prohibir llevar el carrito en los supermercados. Claro está, que mejor seria que tuvieran al menos el sueldo mínimo y.la SS, pero la realidad es que los Hipermercados, nunca los contratarán para hacer eso, (y nosotros tampoco), y o hacemos la vista gorda, o eliminamos una de las escasas formas que tienen de vivir sin acudir al robo los mendigos.

  • #009
    SEVERINO FERNANDEZ - 21 mayo 2018 - 16:12

    A los seguidores del «Condom Snorting Challenge» podeis obviar este post. Lo digo por aquello de la infinitud del Universo y de la estupidez que nos decía Einstein.

    Enrique
    Agradezco sus comentarios.

    Enrique,

    Parece que estás dando por sentado que el objetivo del post es «asaltar los cielos» y cambiar el mundo. Nada más lejos del sentido del post. D. Enrique está inmerso en su mundo distinto seguramente al nuestro. Y seguramente su forma de informarse y mirar al mundo no le está sugiriendo el deterioro que produce la sharing-economy, crowd-founding, y demás neologismos que podriamos resumir en «selección natural neoliberal» si somos Darwinianos o «lucha de clases neoliberal» si preferimos otro tipo de aforismos.

    Según sus propias palabras, Él es un académico que utiliza este blog para «la organización de sus clases» y lo publica para disfrute de unos pocos privilegiados que le seguimos, y por tanto parece obligado enriquecerlo con otros puntos de vistas y de paso sugerirle nuevos enfoques, que aunque a nosotros nos parecen obvios, seguramente le hacen resonar en su mente viejos conceptos de un mundo que se quiere olvidar, me recuerda en cierto modo a nuestro Juan Ramón Jiménez cuando decía que «En España no hay nada. Yo sólo leo a los extranjeros»

    Por ejemplo un tema que nos encanta a los lectores de este blog: la conducción autónoma, y no veo por ningún lado cacarear: el piloto que está haciendo en Talavera la propia Telefonica con microbuses autónomos. Igual es que no es interesante como lo de los monopatines, de hecho a mi me han inspirado, cosa que le agradezco profundamente.

    http://www.elmundo.es/tecnologia/2018/04/10/5acc9fd5468aeb2d1c8b4666.html

    Gorki

    Entiendo su punto de vista, y coincide con lo señalado en el mío que la necesidad es la que provoca que las personas acepten ciertas tareas. En su comentario le llama trabajo a lo que realizan. Gracias por no llamarlo «explotación de los ciclos o recursos ociosos: AL PAN PAN Y AL VINO VINO. GRACIAS
    Desde un punto de vista moral sin embargo no se puede aceptar que cualquier actividad, asumamos que sólo es alegal, se pueda ofrecer a cambio de una miseria. La realidad no contada, es que un negocio de unas starups se pone en marcha, y si hay que explotar a las personas, hágase…
    Sin entrar en el caso particular, en general, se trata de explotación y aprovecharse de unos cuantos aliens hispanos, afroamericanos(perdón negros), exconvictos,… cuando debería ser un trabajo para que unos estudiantes pudieran pagarse su educación y sacarse un dinerillo extra,… como se hace aquí con las clases particulares.

    • Carlos Quintero - 21 mayo 2018 - 18:44

      Respecto al piloto de microbús autónomo de Telefónica en Talavera de la Reina, leyendo y viendo el vídeo de la fuente original (Telefónica):

      Telefónica presenta el primer caso de uso 5G con conducción autónoma y consumo de contenidos

      Telefónica lo que «vende» es el 5G, no la conducción autónoma. El 5G no es necesario para la conducción autónoma aunque Telefónica diga que se puede usar para enviar datos de telemetría. Vamos, que podían haber demostrado el 5G en piragua por el Tajo. Respecto a usar el 5G para el ocio en un vehículo autónomo, creo que va a pasar como en el metro de Madrid o en los aviones: uno ya se lleva sus contenidos para entretenerse y lo que se desea sobre todo es…un enchufe para en el asiento para cargar su propio dispositivo.

      Veo pues normal que hablemos más del coche de Waymo y del robotaxi de Krigan.

      Pero gracias por el apunte, en mi próxima visita familiar intentaré subirme al microbús :-).

      • Miguel Durán - 22 mayo 2018 - 07:21

        Sobre lo.de llevar el contenido, el otro dia me lleve una sorpresa al ir.a Almeria en Bus de ALSA. En todos los respaldos habia una especie de tableta Android con conector de auriculares y USB y distintas alternativas (ver unas 20 peliculas, otras tantas series jugar al Candy Crush, navegar, leee el Quijote…) que por el puerto incluido supongo no queda limitado a lo que hay en el dispositivo/NAS del bus sino a lo que metas con un pendrive. Pero es que ademas entre cada pareja de asientos habia un enchufe Shucko con dos puertos USB de carga con lo que podias llevar el.portatil enchufado (8 horas de viaje sobrepasan la autonomia de casi todo) y dos moviles o tabletas cargando. Mi mujer y yo conectamos cada uno su movil y lo usamos para el WS/Telegram y Facebook, mientras que la tableta la dejamos para ver pelis o navegar (el Candy Crush bloqueaba el.equipo por su empeño.de actualizarse y no dejarte hacer nada mientras). Todo un contraste conel WiFi gratis y ahi te compongas de hace dos años. Si hubiera sido un bus SUPRA mas caros pero con mas espacio para el viajero podria incluso haber ido teletratabajndo con mi .ultrabook.
        Ya ves no necesitas del prototipo de Timofonica para disfrutar de eso.

    • Gorki - 21 mayo 2018 - 19:46

      Yo espero y deseo que llegue el día que haya el suficiente trabajo para que nadie tenga por fuerza que hacer trabajos GIG, aunque creo que siempre habrá quien por su afán de mayores ingresos, desee comentar sus ingresos con este tipo de trabajos..

      Pero mientras llega ese día, a mi me parece maravilloso que haya trabajos GiG que permitan, que los que no encuentran trabajo puedan vivir, aunque sea mal.

      Sin embargo para llegar al pleno empleo, no creo que sea necesario eliminar los trabajos GIG, hay muchas cosas que hacer, que solo se pueden llevar a cabo si se permite otro tipo de contratación diferente que la de un empleo fijo de ocho horas.

      Por otra parte considero prioritario que los aliens hispanos, afroamericanos(perdón negros), exconvictos , coman, (aunque sea poco y mal) que unos estudiantes pudieran pagarse su educación y sacarse un dinerillo extra, . Claro que en esto de priorizar cada uno tiene su escala de valores.

  • #013
    Xaquin - 21 mayo 2018 - 19:53

    No me gusta usar nueva palabras para los antiguos conceptos. Pero ayudar a sobrevivir a mendigos con el arrastre de carritos no tiene mucho que ver con el uso de la fuerza de trabajo en edad universitaria para funciones de «economía colaborativa». Ni siquiera la venta de libros a domicilio es comparable. Como Enrique mismo informa, este tipo de economía hace montar auténticas mafias a su alrededor. Es «otra cosa».

    Y hablando de España, no será cierto que hai poco que ver (intelectualmente hablando). Pero mucho tampoco, ya que en este puto país se practica con ahínco el «mierda yo, tú más».

    • SEVERINO FERNANDEZ - 21 mayo 2018 - 20:20

      Está claro !!!

      Evidentemente la economia no regulada conduce a las mafias. Le llames patinetes, uber, prostitución, car-sharing o cualquier cosa.

      Diferente es que alguien de unas clases de apoyo, o se haga socorrista en una piscina,

      Pero lo siento lo de empujar carritos, ayudar a aparcar, no lo veo, muchas veces es extorsión del gorrilla pura y dura.

      Lo primero es reconocer y llamar a las cosas por su nombre y p.ej. LAS EMPRESAS CARNICERAS son lo que son por mucho nombre de consultoria que utilicen…

      • Miguel Durán - 22 mayo 2018 - 07:24

        Carnicas, charcuteras, casqueras e incluso niveles inferiores. He llegado a ver 5 subsubsubsubsubcontrataciones en informatica y he sufrido por 10 años una de tercer nivel

  • #016
    Oscar - 21 mayo 2018 - 21:22

    Una solución sería negociar con el ayuntamiento en cuestión la instalación de enchufes y espacio para «aparcar» el vehículo cerca de farolas que solo carguen si reconoce el aparato enchufado.

    El ayuntamiento o empresa eléctrica corre con gastos de instalación y las empresas pagan por kw

    Win to win (bueno, solo pierde el peatón que ve inundada ciertas aceras de patinetes y motos eléctricas y los perros que no alcanzan a mear la farola)

  • #017
    Gorki - 21 mayo 2018 - 21:47

    Esto convencido de que quien por necesidad se ve obligado a realizar los trabajos GIG mal pagados que se le ofrecen, habrán acogido con alegría la alternativa que se les ofrecen quienes son partidarios de prohibir los trabajos que hoy hacen.

    • Krigan - 21 mayo 2018 - 23:27

      Hombre, Gorki, todo depende de si queremos o no que exista el derecho laboral, incluido el salario mínimo, la prohibición de los falsos autónomos, y un largo etc, incluidas las pensiones (lo digo porque eres pensionista, y el dinero de las pensiones viene precisamente de las cotizaciones a la SS).

      Seguro que la gente esa agradecería todavía más que hubiera una RBU o RMI. Nadie debería estar trabajando a un euro la hora, y si además lo hace por necesidad eso me parece un argumento en contra, no a favor.

      • Gorki - 22 mayo 2018 - 00:14

        Si se eliminan esos trabajos, ¿Los vas a dar de comer tu?

        • Krigan - 22 mayo 2018 - 00:49

          Sí, y tú también, si se aprueba una RBU o RMI.

          • Gorki - 22 mayo 2018 - 08:53

            ¿No deberíamos aprobar el RBU primero?

          • Krigan - 22 mayo 2018 - 09:37

            Gorki:

            Hace ya décadas que deberíamos haber aprobado como mínimo una RMI a nivel de toda España, pero a día de hoy eso es algo que sigue estando solo en algunos municipios y comunidades autónomas.

            Ahora bien, históricamente lo que ha pasado es que primero se aprobó el salario mínimo (y otros muchos derechos laborales), y después, tan solo en algunos sitios, una RMI o similar.

            En aquellos sitios en los que todavía no hay RMI, ¿deberíamos quitar el salario mínimo? No a menos que queramos que el salario de los más desfavorecidos venga marcado por su grado de necesidad. La regla de que cuanto más necesitado estés menos vas a cobrar me parece un pelín inaceptable.

            Tu argumento consiste en decir que habrá puestos de trabajo adicionales si aceptamos que a los más necesitados se les pague una miseria. Esto es simplemente falso. Se contrata a alguien cuando se necesita un trabajador, si no lo necesitas no lo contratas.

            El salario mínimo actual es de 735,90 euros (14 pagas). No existe el puesto de trabajo hipotético que se crearía si el salario mínimo fuese de 300 euros. Reducir el salario mínimo no reduce el paro, de la misma manera que aumentarlo no aumenta el paro. La demanda de trabajadores es rígida.

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