Los trolls como excusa

En internet hay trolls. Es algo prácticamente intrínseco a su naturaleza, sobre lo que se ha escrito ya muchísimo: cualquier cosa que rebaje las barreras de entrada a la creación y difusión de contenidos, y que posibilite además un modelo de interacción en el que determinados estímulos habitualmente gestuales y no verbales no son habitualmente percibidos es susceptible de recibir su visita.

Los trolls, efectivamente, son incómodos, molestos, no sé si son «un hijoputa de toda la vida pero a nivel virtual» porque ignoro la profesión de las madres de todos ellos, pero seguramente aquellos que practiquen el tema habitualmente estén próximos a serlo, a pesar de que sus madres sean unas santas. Por eso lo que más me llamo la atención de la carta al director de Elvira Lindo de ayer en El País en la que se dedica a arremeter contra la presencia de trolls fuese eso, la constatación de que la dichos trolls le parezcan un fenómeno sorprendente, porque son tan antiguos como la red misma.

A partir de ahí, dedicarse a descartar el valor de la red o su idoneidad como soporte por el hecho de que existan trolls en ella me parece simplemente tomar el rábano por las hojas, confundir el tema completamente. Pensar que los trolls van a «expulsar  a los lectores con cierto nivel de inteligencia crítica» de los foros en los que estos participan es renunciar completamente a la gestión activa de dichos foros. Como de hecho ocurre, y ahí sí estoy de acuerdo con Elvira, en muchos periódicos y publicaciones. Los trolls existen y hasta pueden abundar según los temas que se traten, de acuerdo. La presencia de trolls en un foro, sea el que sea, es un indicador parcial de su éxito: los trolls no pierden su tiempo en sitios donde no se les va a ver. Por tanto, las necesidades de moderación de un foro se incrementan a medida que se incrementa su visibilidad, de manera absolutamente cartesiana. Al principio puedes postmoderar, borrar aquello que alguien ha escrito y no es deseable que esté ahí, pero al poco tiempo tendrás que pasar indefectiblemente a premoderar, a autorizar uno por uno los comentarios o a desarrollar sistemas de listas negras y blancas.

En esta página la presencia de trolls no es en absoluto habitual: esto es como el salón de mi casa en el que albergo conversaciones que me interesan y me aportan, y me niego a que esté lleno de basura. Cuando hace algunos años tomé la decisión de invertir recursos en premoderación, no fue sencillo: suponía estar pendiente de la página muchas horas del dia, no desconectar nunca de su moderación (mi período máximo de desconexión es la noche por eso de que uno necesita dormir, y las charlas o clases, en las que lógicamente no introduzco pausas para ver si me han comentado algo o no), desarrollar herramientas, etc. Pero el tiempo y la experiencia dejan claro que fue la mejor decisión que pude tomar, porque preserva el «buen ambiente» de la página, permite que se cristalice un importante aporte de información en muchas ocasiones muy válida – muchas veces mejor que la propia que aporté yo para poner la conversación en marcha – y porque evita el «síndrome de las ventanas rotas» que hace que la degradación y la basura crezcan con el tiempo. Hace ya mucho tiempo que no se ven trolls como tales en esta página. Y seguirán sin verse. Quien quiera verlo como «censura» de algún tipo, allá él con su problema.

La participación en la red es su mejor característica. Pero para cristalizarla en algo útil, es necesario invertir recursos. Nada es gratis en la red, por mucho que lo crean esos que se dedican a difamar con las palabras «gratis total». No vale, por tanto, quejarte de los trolls y lanzar enmiendas a la totalidad: hay que ponerse las pilas e invertir en sistemas de moderación que posibiliten que podamos extraer de la red lo que queremos extraer de ella. Si Elvira con su columna está reclamando más y mejores sistemas de gestión para los espacios de la red en los que escribe, bienvenida sea dicha reclamación. Si está cuestionando la red y sus posibilidades… en fin… la cosa no merece mucha más discusión.

46 comentarios

  • #001
    esku75 - 12 diciembre 2011 - 09:10

    Esta señora claramente procede de otros medios, sorprenderse a estas alturas porque te están trolleando denosta poco conocimiento. Los bloggers mas curtidos ya ni os inmutáis ante tales ataques, (como debe ser) y hasta los usuarios ya ni caemos, todo hemos sido algo flamers o trolleando un rato pero como bien dices los hay que cada dia es una guerra particular contra el mundo y digo yo porque no escriben su propio blog?

  • #002
    Pio III XIV, antipapa de Caravanchel - 12 diciembre 2011 - 09:30

    Yo creo que los trolls son un nuevo tipo de performance art

    http://www.youtube.com/watch?v=gkfVdrtLcRs

  • #003
    Ruby - 12 diciembre 2011 - 09:38

    Sin duda es mas interesante este artículo que la Carta al Diretor, donde se mezcla una anécdota con una reflexión sobre la participación en la red.
    Termino de leer y pienso en comentar ese artículo cuando me doy cuenta que no se puede, o no encuentro como hacerlo… y me parece una estupidez llegar a eliminar los comentarios para evitar las conductas inapropiadas en los debates.
    Con lo que cuesta que haya lectores y que buena parte de ellos se conviertan en activos participantes de la conversación… con lo que cuesta que hagan un meGusta y que algunos se atrevan a dedicar un tiempo a rebatir o a aportar su propia visión del tema. No entiendo que se llegue a este punto para evitar los trolls o simplemente maleducasdos.
    Creo en el anonimato, en el uso de seudónimos y que también se pueda comentar conectando un medio con alguna de las muchas redes sociales.
    Queda mucho para que no tengamos que ir registrándonos a doquier para poder participar. La verdad es que antes me resistia y ahora ya me da igual si me registro o no, o si esto me sirve para una sola vez. Nunca me acuerdo como me registre en uno de esos medios de comunicación recién llegados al mudo digital-virtual… pero siempre me quedará el correo electrónico. Esta es mi identidad y si no les gusta tengo otras.

  • #004
    JACO - 12 diciembre 2011 - 09:41

    Opino igual que esku75. El que lleva cierto tiempo navegando, sabe que lo más efectivo para evitar trolls es ignorarlos por parte de los usuarios (la frase ya clásica que se suele utilizar para ello lo define muy bien «Dont feed the troll»), y la moderación por parte de los responsables de webs o blogs.
    Otra cosa es que les interese la polémica a dichos responsables, por ejemplo, solo hay que ver el tono de los comentarios en los portales de prensa deportiva….

  • #005
    Javier - 12 diciembre 2011 - 09:44

    En cierto modo, que entren trolls en tu blog o página web denota una visibilidad muy sana, puesto que en caso contrario, sólo puedes suponer que hablas para un grupo sectario, que comulga habitualmente con tus propuestas y que no quiere avanzar dialécticamente. Dicho esto, trolls go to yours hell’s house!

  • #006
    Victor Fernandez - 12 diciembre 2011 - 09:48

    Elvira Lindo será una gran escritora con varios libros de éxito pero pero en la red esta muy verde, es una de las que estaban citadas en un artículo donde se exponía el miedo que había en el ministro de cultura y demás entorno cercano en todo lo referente a la red y como más o menos hundíamos los sectores culturales. Yo no le daría mayor importancia porque no la tiene.

  • #007
    Diego - 12 diciembre 2011 - 10:11

    En otros medios digitales pude ver la misma noticia sobre la comunidad china que se manifesto en Madrid y lo cierto es que los comentarios daban mucha vergüenza ajena. Es responsabilidad del medio o del dueño del blog moderar, filtrando los comentarios y eliminando los mensajes racistas, sexistas, homofobos o cualquier otra apologia al odio o a lo desconocido. Es imposible conseguir que los lectores se identifiquen y es obvio que es dificil filtrar ese contenido, pero lo que pasa en algunos medios es increible. Efectivamente lo has comentado otras veces, internet y el «anonimato» que brinda es clave para aquellos que son minoria, porque les aporta voz, pero algunas voces deben ser acayadas, pues solo aportan ruido y basura.

  • #008
    Miguelón - 12 diciembre 2011 - 10:16

    Muy bien dicho Víctor Fernández.

  • #009
    Pio III XIV, antipapa de Caravanchel - 12 diciembre 2011 - 10:19

    @Victor Fernandez, no sé que decirte. El del blog «Lector Iracundo» hace una crítica bastante fuerte de Elvira Lindo y compañía

  • #010
    Alejandro Delgado - 12 diciembre 2011 - 10:21

    Entiendo perfectamente que tomar la decisión de eliminar el tiempo real en los comentarios debe ser una decisión dura. Estoy convencido que por experiencia propia nabrás sentido la «frustración» que produce no ver el texto producido, publicado al momento. No obstante, una linea de comentarios limpia, es sin duda mucho más agradable de leer, incluso para los propios lectores (y no me refiero sólo a trolls, también duplicados, offtopics, mensajes personales al autor, que a veces dejamos aquí).
    La solución, tampoco es tan complicada, recuerdo en los primeros tiempos del correo electrónico, cuando las organizaciones tenían miedo de que «cualquiera» escribiera al director general, hasta que entendieron, que los correos llevan originador. La firma digital estandarizada, oel DNI electrónico, son sin duda herramientas que permitirán «eliminar» los trolls, que tienen su única razón de ser en el anonimato.

  • #011
    Raúl C. - 12 diciembre 2011 - 10:22

    El otro día me encontré con un blog interesante (que ya no recuerdo), y observé que no se permitía comentar: la razón que daba el autor es que no iba a permitir que se dijeran tonterías e insultos a su persona en su página. Aunque pagaran justos por pecadores, no habilitaba comentarios y punto. Como no se podía comentar, no pude responderle que para eso están las gestiones de comentarios y cortar las alas de tus visitas así, de primeras, no mola nada. De hecho ni volví ni sabría volver a esta página.

    En mi humilde experiencia como moderador de una parte del foro de bubok, me he encontrado con algo peor que los trolls (posiblemente una subespecie): los clonadores. De repente aparece un usuario por ahí que debe tener como 15 cuentas en el mismo foro, llegando a darte la impresión de que todos los que hablan son la misma persona. Eso es peor que un troll. Es el troll perfecto, porque acaba todo el mundo poniéndose a la gresca y no sabes donde dar el golpe.

    Cuando me encuentro con un escupitajo de estos, siempre me asalta la misma pregunta, ingenua por mi parte, sí, pero inevitablemente antigua: ¿por qué hay gente así?

  • #012
    Borjez - 12 diciembre 2011 - 10:23

    Leí el artículo de Elvira Lindo y entendí que defendía la misma premoderación de la que hablas, Enrique. Hay demasiados medios que argumentan que esto no es posible, ¿les interesarán los debates radicalizados para tener más visibilidad?

  • #013
    Yreaction - 12 diciembre 2011 - 11:00

    Hola Enrique

    A mi lo que me preocupa seriamente no son este tipo de trolls, si no mas bien los que generan contenido copiando solamente la cabecera de un articulo o entrada montando en un cms repleto de publicidad.

    Esta gente es la que hace daño. Se me antoja la analogía casi perfecta a la interpolación de imágenes, obtienes 1000 páginas a partir de 1 interpretando levemente porciones en cada una de ellas para montar un indice de resultados superior.

    Es que ya es incluso perjudicial para la salud, no importa que seas capaz de abstraerte y usar las palabras clave adecuadas, el contenido se sigue interpolando.

  • #014
    Papus - 12 diciembre 2011 - 11:14

    La veo reflexionando dentro de poco el porqué los navegadores son cuadrados y no triangulares, como la estratificación social, o porque tienen nombres masculinos y solicitando cuota de nombres femeninos en internet.

    Un hijo de puta no se mofa de una opinión ridícula. Un troll en muchas ocasiones pone a prueba el onanismo mental de los gurús mediáticos, y eso puede más que el discurso único de un intelectualismo de papel.

    Los patinazos de los lideres mediáticos y de opinión en Internet esta llegando a cuotas cercanas al Marxismo de Groucho.

    El miedo al impúdico ridículo que se hace en Internet, es lo que algunos se refieren «Trolls», etiqueta ambivalente donde la haya, porque la otorga el que se ve lesionado en su discurso.

    Internet es un ecosistema vivo, no una torre de marfil para los faros de alejandrinos del discurso unidireccional.

    ¿Me ha quedado «Postmoderno»?

    Vamos, a esta señora le han pedido que critique a la voz libre de Internet y ha tomado como excusa el «miedo» a los «trolls» que enturbian su cristalino ideario.

    Mientras, los políticos no saben donde esconderse de la sátira plebeya. Nunca en la historia de los Mass media se les han visto tanto las verguenzas y aireado la corrupción.

    La opinión pública ya no parte de una voz única y autorizada. Ahora, es objeto de debate.

    Como su artículo. (estás hecho un Troll, Enrique) :)

  • #015
    Papus - 12 diciembre 2011 - 11:23

    Ah, olvidaba mencionar de dónde viene inspirado este artículo… eres una «Musa» involuntaria Enrique, lo siento :)

    http://youtu.be/uSclJJGPkoU

    (No debí ponerte como ejemplo de automoderación, más que de moderación preventiva, cachís)

    ;)

  • #016
    David - 12 diciembre 2011 - 11:35

    Los Trolls, no són un fenomeno específico de internet, sí no que más bien es inherente a cualquier medio de expresión de opiniones. De niño me crié en el ambiente de los radioaficionados, Solía escuchar a los demás con la emisora de mi padre y he de confesar que una de las cosas que más me divertía, eran los tipos que se entrometían en las conversaciones ajenas, proferían insultos y opiniones extremistas al aire o expelían eructos. En aquel tiempo y en ese medio,ya existían los Trolls. Eran molestos, irritantes y groseros; pero resultaba interesante para un niño, oír como se encolerizaban los otros radioaficionados y se enzarzaban en violentas disputas con ellos. Los Trolls no acabaron con las ganas de expresarse de los radioaficionados ni expulsarán a los participantes serios de los foros de internet. Moderar sí, pero temer tanto al Troll como para eliminar los comentarios, es sí mismo, «Trolear» al lector.

  • #017
    Josue - 12 diciembre 2011 - 11:50

    No sé dónde habéis leído que a Elvira Lindo le sorprenda lo de los trolls, de hecho su último párrafo hace ver que lo conoce desde hace mucho tiempo. Lo ha escrito ahora porque… porque le ha salido del moño, es lo que tienen los escritores, escriben sobre lo que les apetece cuando les apetece.

    Y lo de presuponer que puede estar pidiendo que se elimine Internet… mucho conspiranoico por aquí…

  • #018
    Lluís Vilarrasa - 12 diciembre 2011 - 13:02

    Todos tus comentarios son excelentes. Estoy de acuerdo en que los trolls son molestos y a veces realmente desagradables, y la mejor manera de controlarlos es la premoderación (aunque álguien lo pueda considerar censura, que no lo es) pero en la frase:
    «no sé si son “un hijoputa de toda la vida pero a nivel virtual” porque ignoro la profesión de las madres de todos ellos»

    el uso de la palabra hijoputa te rebaja a su mismo nivel. Los insultos están fuera de lugar.

    Un cordial saludo,
    Lluís

  • #019
    Anonymous - 12 diciembre 2011 - 13:09

    Pensar que los trolls son unos personajillos en oscuras habitaciones que se dedican a joder por diversión es muy cinematográfico, pero está algo alejado de la realidad.

    Ideas disidentes, críticas a la moderación, un exceso de carisma o incluso la proposición de iniciativas diferentes a la norma son habitualmente consideradas «trolleo». Ningún internauta merece ser llamado como tal si nada de lo que ha dicho ha sido considerado «trolleo» por alguien en alguna parte. Incluso los propios trolls genuinos (vándalos) suelen realizar acusaciones de troll a otros usuarios como medio de vandalizar.

    Incluso las protestas online que tanto están de moda pueden utilizar técnicas de «trolleo» para causar malestar en foros u otros medios (Anónimo las ha utilizado muchas veces, sobre todo cuando no tenía máscara).

    Ser o no troll entra en lo subjetivo. Pero lo que está claro es que un usuario de internet el máximo daño que puede causar a otro es ofenderle. La inmunidad contra los trolls es aprender a no ser ofendido, aprender que estamos jugando a «el que se ofende pierde». Para eso tenemos que pensar diferente que en la vida real, y aprender a desarrollar esta inmunidad anti-troll cuesta años. Sin importar que el troll se un vándalo o un bienintencionado usuario con la lengua suelta.

    Elvira Lindo, como todos los novatos interneteros, seguirá actuando en internet como en su vida cotidiana y se pensará que los trolls son personajillos en oscuras habitaciones. Y será presa del trolleo más débil imaginable.

  • #020
    Anónimo - 12 diciembre 2011 - 13:10

    Enrique, una vez más GRACIAS.
    Muy poca gente escribe sobre esto y es más que importante.
    Aquí también hablan de esto planteando si se considera el trolling delito o no http://www.nortonfanclub.com/?p=1105
    ¡Saludos!

  • #021
    Sourtech Moderación - 12 diciembre 2011 - 14:09

    Como empresa especializada en moderación y social media, los trolls son un ser vivo que habita en la red y en cualquier bar del mundo. Tener un troll o cientos es un problema de la persona que esta detrás del ordenador que no quiere participar de la conversación sino destruirla. Y justo este punto es el importante, porque un troll puede ofenderte o desesperarte pero nunca debes dejar que arruine la conversación que tanto trabajo a costado. Es esencial tener un sistema de moderación activo que te permita bloquear usuarios, ips pero también personas, moderadores, que conozcan la conversación y su gestión porque las maquinas tienen grandes limitaciones.

  • #022
    Gorki - 12 diciembre 2011 - 14:39

    Uno suspira por los trolls, creo que son la medida de nuestro éxito blogero. No me refiero claro está, al SPAM que solo busca conseguir un link a su página, sino al auténtico y acreditado troll, aquel que se molesta en encontrar la frase justa que te te va a sacar de quicio, al artista de la bilis.

    ¡Si ellos supieran la ilusión que me hace recibirlos en mi página!. Son tan escasos en mi blog, que realmente los trato hasta con mimo, con la esperanza que no me abandonen a media tarde como un desodorante y me entretengan hasta altas horas de la noche, pues son como las estrellas de Michelin, o los megusta de FB, lo que indica que vas por la vía del éxito.

    Si hay algo que «envidio» a eDans, no es solamente la abundancia de trolls, sino incluso, que tuvo dos páginas de señores que públicamente fardaban de no leerle. ¡Eso es clase!, ¡Eso es llegar tocar el cielo con las manos!.

    Señores trolls, ¡porfa!, dense una vuelta por mi blog, que les trataré como se merecen, sin cabrarme, jugamdo al raton y el gato, siendo yo el gato. Y con todas las maravillosas posibilidades que te dá el ser webmaster del blog y tener el poder de contestar o no, borrarte o no e te incluso, ¡por qué no!, modificar un poco lo que dicen para poder dejarles aún mas en ridículo. ¡Lo paso de bien con vosotros!.

  • #023
    Enrique Dans - 12 diciembre 2011 - 14:46

    Contestando varias a un tiempo…

    En ningún caso he pretendido faltar a Elvira Lindo, decir que no sabe nada de la red ni nada por el estilo. Ni trollearla, por supuesto :-) Sí quería comentar que este tipo de debate me parece, sencillamente, superado en la red, aunque no sea malo que se repita por el lado de los medios tradicionales: si quieres polémica, sangre, insultos, barbaridades y a cambio, claro, un clima insoportable que deje fuera a los que genuinamente estaban dispuestos a comentar con cierta calidad y criterio, ya sabes: comentarios sin moderar o con postmoderación mínima, eliminando únicamente aquello que te pueda meter en un lío legal (hate speech, racismo, etc.) Desgraciadamente, es lo que muchísimos medios están haciendo, y creo que por donde va Elvira: para tener esa interacción, mejor no tenerla. Pero para muchos medios que creen que pueden sacar algo bueno de la red sin invertir nada a cambio, parece que es lo que hay.

    Para los demás, para donde se pretenda que impere la lógica, el diálogo (disonante incluído, por supuesto) y la reflexión, el dilema es que a partir de un cierto volumen y visibilidad (y por tanto, incentivo para los trolls), o postmoderas, u olvídate. Y postmoderar implica invertir recursos, porque tiene que ser un proceso manual. Que además, como habéis comentado acertadamente algunos, no implica borrar solo lo que se suele entender como trolling: implica también eliminar spam que a veces no es tan obvio pero es spam (la última moda es poner algo «con apariencia de meditado» pero acompañado de los consabidos enlaces), trackbacks de sitios de copy&paste, y los llamados «comentarios mamporreros» de «qué interesante», «fantástico», etc. que no aportan nada. Es un proceso manual sí o sí, que lleva su tiempo, pero que incide en uno de los que para mí es factor fundamental de la calidad de una publicación en la red. Un proceso que decididamente aporta valor y al que hay que darle mucha importancia.

    Para mí, como ya comenté en la entrada, la premoderación fue la mejor decisión que tomé con respecto a mi página. A día de hoy tengo un «núcleo duro» de comentaristas formado por alrededor de unas cien personas que publican sin supervisión porque están en lista blanca, y un tiempo de moderación aceptablemente bajo para quienes no pertenecen a esa lista porque no han comentado aún lo suficiente, pero con ese sistema he conseguido ofrecer un incentivo mínimo al trolling. Los que me acusaban de «censura» a estas alturas son cuatro frustrados cabreados con el mundo y refugiados en un par de paginitas en las que el 90% de los comentarios son siempre el mismo autor y que no tienen la más mínima relevancia para nadie, y a cambio sigo recibiendo un valioso aporte de opinión (muchas veces discordante, pero por lo general aceptablemente educada) y de referencias válidas a través de los comentarios. Francamente encantado con el valor que me genera la comunidad de lectores, de verdad.

  • #024
    Antonio Garcia Saenz - 12 diciembre 2011 - 15:01

    Pero el problema sigue aunque no existiera trolls, aumenta y aumenta la cantidad de megabytes, gigabytes y terabytes, por miles, millones, billones, trillones, progresivamente a perpetuidad mientras va disminuyendo y disminuyendo en la misma proporcion la cantidad de conocimiento contenido y eso es una regla de estos nuevos medios, e internet acabara como un tiesto inservible

  • #025
    Enrique Dans - 12 diciembre 2011 - 15:06

    #024: Al revés, Antonio, exactamente al revés. Internet no es como el mundo físico, donde el exceso de información se vuelve imposible de manejar. En internet, a más información, más referencias, más enlaces, y mejor se localiza lo relevante, como bien demuestra el éxito de Google. No es fisico, funciona de otra manera. Puedes crear toda la información que quieras, que eso hará que la que buscas en un momento dado sea más fácil de encontrar. Lo bueno y lo aprovechable aflora mejor cuanta más información se produce y más conexiones se generan.

  • #026
    paco23 - 12 diciembre 2011 - 15:28

    FREE Teddy

    Problem trolling?

  • #027
    Anónimo - 12 diciembre 2011 - 17:54

    Elvira Lindo es muy amiga de Ángeles González Sinde. Y está enfadada con los internautas porque se han opuesto a la ley que su amiga ha querido imponer. Les molesta no poder controlar la red desde sus medios y ahora buscan ya no la criminalización del internauta ladrón sino la «trollización», que es otra forma de descalificación de los usuarios de la red que se rebelan ante estas cosas.

    -¡Hay que poner orden en este caos de ladrones de derechos y de trolles!- claman Sinde y Lindo.

    Recordando una crítica de Una palabra tuya (película dirigida por González Sinde sobre una novela de Elvira Lindo):

    «González-Sinde lleva la tristeza al grado máximo. Todo es fúnebre en este relato de perdedoras que comparten soledades, miedos y algún sueño de felicidad. O sea, lo de siempre pero sin emoción.»

    «Digo que no todo el que aborde temáticas cercanas, articuladas en torno al triste gris de la mediocridad, logra horadar la fibra emocional y morar en ella al calor del recuerdo grato. La presidenta de la santísima Academia nacional (se refiere a Gonzalez Sinde) no termina de convencer en su romance intertextual con Elvira Lindo. Es el germen literario el principal obstáculo para que esta historia de perdedoras cobre peso y autonomía, a la vista de un desarrollo desequilibrado, más centrado en el bosquejo de las situaciones, decididamente lúgubres, sin la densidad psicológica que tanta pesadumbre requiere. Nunca más acertado que aquí el popular comentario que desestima una obra cinematográfica por su herencia novelística. Ángeles González-Sinde se escuda en la España currante, madrugadora y esclava de horarios relatada por Lindo, en todos esos héroes que a diario levantan el paísaunque el aire gélido les agriete el alma. El dueto femenino sirve para corporeizar un idéntico miedo a la soledad vital que las impulsa a una amistad de roce casi lésbico, en lo que parece un cruce de destinos imprevisto -como lo son todos-.»

    http://www.muchocine.net/criticas/7276/Una-palabra-tuya

  • #028
    Albert - 12 diciembre 2011 - 18:29

    De acuerdo con el tema del pre-moderar adoptado en este blog. Lo veo muy necesario, al igual que retirar las mierdas de las aceras, simple cuestión de higiene.
    *
    Slds

  • #029
    Luis J. - 12 diciembre 2011 - 19:22

    Enrique, al leerte me ha hecho gracia recordar, a modo de curiosidad y en lo que se refiere a la Sra. Lindo (por cierto, fantástica su serie de obras sobre Manolito gafotas), algo leído el otro día que parece indicar que en la casa de la escritora se respirara un cierto arcaismo tecnológico, tal y como se desprende del comentario leído en un artículo de Juan G. Jurado en el que el esposo de Dña. Elvira, a la sazón el también afamado escritor D. Antonio Muñóz Molina, tildaba de paleto y provinciano al mencionado articulista por la relevancia que éste otorgaba a la irrupción del libro digital, a lo que además añadía sin empacho, que era una mera «moda pasajera».

    En cuanto a los trolls, no me cabe duda que son inherentes a la propia Red. Por la calle hay numerosos imbéciles, psicópatas, gente con innumerables carencias intelectuales, afectivas, sociales, etc., etc., que cuando llegan a casa (o desde dispositivos móviles) se ponen sobre un teclado… por lo que Internet no se escapará nunca a ese tipo de individuos. Unos por pura diversión, otros por el placer de sentir que molestan, otros por descargar sus frustraciones personales,…, y también están los «profesionales», los que se encargan de «animar el cotarro» para generar más tráfico y comentarios.

    En mis blogs también practico la moderación previa, y considero que es la mejor medida. En mis participaciones en diferentes sitios tengo como norma «no alimentar a los trolls» aguantándome las ganas de decirle cuatro cosas o poner en su sitio al inadaptado de turno, y aunque la indiferencia en ocasiones llega a radicalizar al troll, según he podido comprobar estos años, se podría decir que es la medida más acertada y con mejores resultados.

    ¡Saludos!

  • #030
    Antonio - 12 diciembre 2011 - 20:50

    Jolines con… Elvira Lindo.
    Anda… ¡ Qué no tiene que aprender.!

    Me recuerda un chiste:
    – Oíga, venía a informarme sobre un tema.
    – Pues mire en el sex…
    – Oíga que no es un tema de sexo, ni de sex-shop, ni de sexualidad, ni de esas cosas.
    – Usted perdone, solo quería decirle que la sección de información está en el SEXTO PISO.

    – ¿Y a que refiere Elvira Lindo como trolls.?
    – ¿A personas, a máquinas, ordenadores, personas humanas, racionales, irracionales…?
    – ¡ Pues anda que no hay Ordenadores que hacen puro Marketing… haciendo creer a muchos usuarios que están hablando con una persona, cuando realmente es una máquina.!
    – Y en lo de marcar direcciones y códigos automáticamente, pues casi hace que lo anterior sea una minucia…

    En fin Enrique, un tema muy interesante para tus clases.
    ¿ Podrías escribir algo sobre ello en tu blog, cuando puedas o creas conveniente ?

    Saludos.

    PD.
    A la atención de Elvira lindo: Un texto y un link para el comienzo de su aprendizaje sobre trolls y otras trolas.

    CAPTCHA es el acrónimo de Completely Automated Public Turing test to tell Computers and Humans Apart (Prueba de Turing pública y automática para diferenciar máquinas y humanos).1
    Este es un típico test para la secuencia «smwm» que dificulta el reconocimiento de la máquina distorsionando las letras y añadiendo un degradado de fondo
    Se trata de una prueba desafío-respuesta utilizada en computación para determinar cuándo el usuario es o no humano. El término se empezó a utilizar en el año 2000 por Luis von Ahn, Manuel Blum y Nicholas J. Hopper de la Carnegie Mellon University, y John Langford de IBM.
    La típica prueba consiste en que el usuario introduzca un conjunto de caracteres que se muestran en una imagen distorsionada que aparece en pantalla. Se supone que una máquina no es capaz de comprender e introducir la secuencia de forma correcta por lo que solamente el humano podría hacerlo.
    Como el test es controlado por una máquina en lugar de un humano como en la Prueba de Turing, también se denomina Prueba de Turing Inversa.
    http://es.wikipedia.org/wiki/Captcha

    PD de PD.
    La información puede que más extensa, se puede consultar en el lenguaje de Shakespeare: El Inglés.

  • #031
    Xaquín - 12 diciembre 2011 - 21:52

    Me he reido de lo lindo con Doña Elvira (y siento el chiste fácil). Y luego van de progresistas… Los trolls en la red no son tan importantes como en la tierras medias del mundo, pero tienen derecho a cagar donde les pete…nuestra obligación es cuidar que usen los retretes con tino…o vamos a cerrar los baños porque algún menda no sabe usarlos?

  • #032
    As - 12 diciembre 2011 - 23:58

    ¿Recuerdan cuando Google+ prometía reducir los trolls en una discusión?
    Lo hicieron tan bien que rectificaron y ahora permiten seudonimos, de cualquier forma no es necesario ocultarse, gente con nombres reales verificados tambien son trolls

  • #033
    Mertxe - 13 diciembre 2011 - 00:04

    Yo he leído el artículo y me ha parecido muy clara su posición: que si los miedos, sobre todo periodísticos, quieren mantener un nivel de calidad en sus publicaciones, han de controlar el trolleo. Que es lo mismo que tú comentas que haces Enrique y que otros, como yo misma, hago en mi Blog aunque con menor intensidad. Una cosas es dar cabida a la crítica y otra dejar espacio a la descalificación y la provocación grosera.

    Lo que no tengo claro, es le tema del anonimato. Le veo pros y contras y necesitaría más información para poder valorar la conveniencia de pedir identificación. Me parece que si se controla al troll, el anonimato es posible. Pero claro, el que controla puede «eliminar» cosas que no sean trolleos. En fin, que es complicado.

  • #034
    Anónimo2 - 13 diciembre 2011 - 00:19

    Podemos suponer que como escritora a Elvira Lindo no le gustaría que le citaran (dos veces) en el artículo de un periódico como El País llamándole «Elvira Lindro«. Pues mas o menos es esto lo que ella ha hecho con Jaron Lanier al que se refiere como «Jaron Larnier» (sobra una «r»).

    Y no deja de ser paradójico que Lindo, además de defender en su artículo los derechos de los chinos en España (algo que le honra) y de citar incorrectamente al supuesto creador del término «maoísmo digital», escriba también en el mismo:

    «Había lectores que escribían su comentario cambiando las erres por las eles. Te mondas. Otros que los mandaban a manifestarse a Tiananmen. Ole Ole.»

    Lindo no ha cambiado las erres por las eles, sencillamente ha puesto una erre donde no debía existir ninguna…

    A Jaron Lanier se le va la olla: http://www.nodosele.com/blog/2010/01/15/a-jaron-lanier-se-le-va-la-olla/

    Maoísmo Digital: http://gloriamundo.blogspot.com/2010/04/maoismo-digital.html

    Julian Assange and the rise of nerd supremacy: http://www.abc.net.au/radionational/programs/philosopherszone/julian-assange-and-the-rise-of-nerd-supremacy/3008680

  • #035
    David Pons - 13 diciembre 2011 - 06:46

    Y también a veces (muy pocas) sirven para que hagamos una reflexión. No los apoyo, pero como no se puede hacer que desaparezcan hay que intentar extraer aquello que pueda tener una visión positiva del asunto. Normalmente, cuanto más trolls más éxito tenemos, aunque no siempre.

  • #036
    Alguien - 13 diciembre 2011 - 09:32

    ¿Pensara Enrique en sustituir el obsoleto formulario wordpress para comentar por otro más util?, como intensedebate o disqus; así automatizas moderación de comentarios

  • #037
    Consultor de Marketing - 13 diciembre 2011 - 10:35

    El mayor desprecio es no hacer aprecio. A los trolls si se les obvia, acaban por desaparecer.

  • #038
    Enrique Dans - 13 diciembre 2011 - 10:56

    #036: No, para nada. Te agradezco la sugerencia, pero esos sistemas añaden un punto más de fallo posible, y además, se quedan con los comentarios. Mi sistema de comentarios es fundamental para mí y quiero que esté bajo mi control, no bajo el de la aplicación de un tercero. Si falla, que sea mi base de datos la que falle, que ya sé yo cómo y hasta qué punto y con qué frecuencia la tengo respaldada, no la de un tercero que gestiona miles de sitios más y para quien mi sitio no tiene demasiada importancia. Ya tuve suficiente mala experiencia en la época de Blogger con los comentarios gestionados desde Enetation, primero, y Haloscan después. Y en cualquier caso, eso no automatizaría la moderación de comentarios. Es más, no me parece que esa tarea se deba automatizar.

  • #039
    Papus - 13 diciembre 2011 - 11:46

    Bien, supongo que el tal Espada tiene tan Romo el filo que necesita de una buena reputación para esgrimir sus ideas en público, sin mojarse en el debate abierto.

    Para él, esos mil papagayos pudieran ser personas indocumentadas y que no utilizan sus nombres reales; tal vez por pudor, tal vez por no ponerse a la altura de demagogos conocidos, tal como en su momento hicieron seudónimos como Voltaire, Azorin, Pessoa, Kierkegaard, Valle inclan, Gabriela Mistral, Pablo Neruda, Mark Twain, Victoria Lucas, Lewis Carroll y así infinidad de de personas que rebosan más talento en una linea, que en toda la mala tinta que él ha derrochado en su obra.

    Que le sean propicias las musas, y los mecenas de la agriedad, ya que el entendimiento elude su estilográfica huella.

    Con permiso, siéntese sobre su erecta caligrafía.

    (No quiero usar una expresión vulgar en un blog ajeno, pero usted ya sabe dónde metérsela)

    http://youtu.be/BL4PH2mWu94

  • #040
    Gerard - 13 diciembre 2011 - 15:47

    Internet siempre termina siendo objetivo de críticas cuando ocurren ciertas cosas, en este caso la actitud de los trolls. Recuerdo la anécdota que comentó David Bravo en el EBE11: Un individuo colocó un anuncio en Internet que buscaba a un señor que desease ser comido. Un señor vio el anunció, acudió y fue comido (canibalismo puro). Los titulares de la prensa y las conclusiones policiales iban en la misma dirección: El problema era Internet. Ejemplos como «Se está descubriendo el canibalismo online» ó «Internet es un lugar cada vez más oscuro». Estos hechos son el pretexto que esperan algunos para involucrar Internet, cuando nada tiene que ver. Como dijo David Bravo: «¿Se lo comió digitalmente o analógicamente? ¿Se diría lo mismo si el anuncio hubiese sido en un periódico o en un tablón de anuncios en la calle? ¿Se criminalizaría el periódico, el teléfono o el tablón de anuncios? No. Pues no permitamos que ocurra lo mismo.

    Internet está siendo víctima involucrada en todos los hechos que suceden en él, a diferencia de los otros medios, periódicos, radios, teléfonos y televisión. Hay que tener un poco de sentido común y recuperar esa ética periodística de 1915 con la modernización que le requieren las nuevas tecnologías.

    Es cierto que en Internet es mucho más fácil actuar que en otros medios, puesto que Internet nos brinda una gran oportunidad de libertad de expresión y de comunicación horizontal. Es fácil que abunden los trolls, que abunde el spam, que abunden las humiliaciones-vejaciones y que abunde la hipocresía. Pero no por eso será un mal medio, al contrario. Hay que invertir y mejorar eso que necesita serlo. En mis sitios de Internet tengo bloqueadores de spam y seguridad. Un amigo incluso tiene un corrector de comentarios «hoygans» en uno de sus sitios. Es una responsabilidad del webmaster. Ni más ni menos.

    Y el resto de usuarios que participan en un medio bidireccional y que se quejan de los trolls, considero que sólo tienen derecho a quejarse delante de los comentarios inmorales: xenofobia, homofobia, racismo y un largo etcétera. Para lo demás, el gestor del sitio es el dueño y hace lo que quiere, por algo paga e invierte en su sitio. Si no invierte lo suficiente, el problema es suyo y en él recae la responsabilidad.

    Buenos días!

  • #041
    Antonio Dueñas Rodriguez - 13 diciembre 2011 - 18:24

    Yo estoy harto de los trolls en los muros de política de Facebook,que le dan al «me gusta» sólo para insultar a los que no piensan como ellos.

  • #042
    Julio - 13 diciembre 2011 - 20:38

    Cualquiera que conozca un poco internet sabe que el anonimato total no existe, conque en la práctica habría poca diferencia entre comentar con un alias o indicando nombre y apellido. Salvo una muy importante: que se acabaría con la plaga de los troll.
    Por otra parte, no coincido con anteriores opiniones en las que en cierto modo se «descalifica» a ciertos sitios por el hecho de no tener disponible la opción a comentar. Esta interacción entre el creador de contenidos y su audiencia es muy reciente, sólo tiene unos pocos años, y sin embargo la cultura escrita y gráfica tiene siglos.

  • #043
    Gerard - 13 diciembre 2011 - 21:18

    Hay que tener en cuenta una cosa. Que alguien piense diferente en política, o cualquier otro tema, no es trolear. Ni que sea una discusión. Un troll es un anónimo con el fin de llamar la atención y desprestigiar a un objetivo, normalmente una persona. Si tiene nombre y apellidos, no es un troll. Es una persona. Si su actitud es negativa, es una mala persona. La puedes bloquear tal y como harías con un troll. Saludos.

  • #044
    luigi - 14 diciembre 2011 - 00:44

    Una de tus entradas más desafortunadas.
    ¿Soy por esto un troll?
    El adjudicar a un comentario la etiqueta de troll es una forma fácil de eliminar una opinión discordante. A nadie le gusta que la mosca cojonera nos este revoloteando noche tras noche, y decidimos llamarlo troll.
    Los trolles no existen. Tras ver que Zapatero ha ganado dos elecciones y aún hubo gente que votó al partido socialista, ¿no les parece obvio que hay gente para todo? Acérquense a los comentarios del diario Público y verán cuantas opiniones absurdas se pueden vertir por minuto, ¡y en ese medio son las dominantes y los trolles son los que dicen cosas sensatas!
    Ya se que por este último párrafo algunos también me llamarán troll, pero de verdad no lo soy, no existen.

  • #045
    Krigan - 16 diciembre 2011 - 10:09

    luigi:

    Los troles sí que existen. Yo he hablado con gente que ha reconocido que fueron troles en el pasado (obviamente, nadie que siga siendo trol te lo reconoce).

  • #046
    Buscador del vacío - 26 diciembre 2011 - 10:34

    No es lo que buscaba por google, de todos modos cuando busco cosas como ‘Foro de trolls vulgares’ o ‘Mmorpgs sin censura vulgar’ me encuentro miles de paginas mencionando las normas de una comunidad o el acuerdo de registro de afiliación de una comunidad o servicio. pero enhorabuena por el artículo porque lo considero bastante ajustado a el concepto de troll y bien explicado.

    @esku75

    Como persona probablemente considerada como muchos por troll, pese a no estar registrado en foros debido al muro del acuerdo de registro de estos, y aunque no suela buscar que la gente se siente increpada por el hecho de hablar con palabrotas y hablar de contenido sexual, te puedo decir por mi parte que tengo un blog y me siento muuuuyyy solo a veces cuando veo mis estadísticas del blog y la pena es que tenga que ver a humanos a diario para llevarme un trozo de pan a la boca, ropa, techo, calzado y medicinas, aunque la culpa en parte la tiene google no posicionar sitios web por temática y tambien la tienen la mayoría de sitios web que son de convicciones contrarias a las mías por prohibir la publicación de dominios, que tanto se apresuran a llamar spam cuando lo ‘no deseado’ no viene de un bot y a veces no hay ánimo de lucro. Eso es el caso al que creo que es que te refieres y es un caso triste e injusto como muchos casos de la especie humana. Un troll en sí no va a publicar en su blog descalificaciones contra un usuario de un foro conocido para saciar su necesidad de sufrimiento y precopacion ajenos en la inmensa mayoría de casos. Sabe, que ademas de jugarsela con ciertas leyes (que cuestiono) sobre injurias por si el usuario se acoje tal cual a esa ley, que si hace una publicación insultando a un usuario, que difícil va a ser que su publicación se encuentre en una buena posicion del buscador de google, que inusual va a ser que el usuario busque su apodo por el google, y menos aun inusual que responda diciendo ‘Me has hecho daño, aqui estoy a tu dispocision para cuando quieras hacerme daño de nuevo, espero que ahora seas feliz’ o algo parecido.

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