En noviembre de 2020, cuando se cumplió un año del anuncio del abandono del Acuerdo de París en la primera legislatura de Donald Trump y, por tanto, se hizo efectiva su salida, publiqué un artículo, «El Acuerdo de París como síntoma«, en el que examinaba la gestión del presidente poco antes de su salida de la Casa Blanca, en el que dejé bien claras mis opiniones sobre el tema.
Desgraciadamente, los Estados Unidos han cometido el error de volver a llevar a la Casa Blanca a este mismo personaje en versión reforzada, y dentro del paquete de órdenes ejecutivas que ha firmado el primer día de su investidura, una de ellas vuelve a ser la salida de los Estados Unidos del Acuerdo de París, con todo lo que ello conlleva. Además, ha retirado todo el apoyo de la administración al desarrollo del mercado del vehículo eléctrico, ha anunciado que eliminará también las inversiones públicas para el crecimiento de la red de cargadores, y como ya hizo en 2020, ha relajado los requerimientos sobre las emisiones contaminantes de los vehículos.
Todo esto es una verdadera desgracia, no tiene otro nombre. Incorporar el negacionismo climático más radical, extremo y acientífico al gobierno del país más contaminante del mundo sitúa a los Estados Unidos como a un país enemigo, que rema en dirección contraria al resto del mundo, que torpedea completamente el proyecto de conseguir superar el desafío más importante que tenemos como especie. Únicamente cuatro países están fuera del Acuerdo de París: Irán, Libia, Yemen… y ahora, los Estados Unidos. Además, desde un punto de vista cultural, los Estados Unidos ya iban enormemente rezagados en la electrificacion de su parque móvil, y retirar los incentivos a su descarbonización es brutalmente irresponsable.
El Acuerdo de París es criticable y que seamos capaces de alcanzar sus objetivos es algo que está muy en entredicho, pero supone un marco muy potente para que los países puedan considerarlo como contexto para sus tomas de decisiones. Hay países que han introducido retrasos en sus objetivos de cumplimiento en función de circunstancias de todo tipo, en muchos casos históricas – por qué vamos a prescindir de determinadas energías contaminantes fundamentales en nuestro desarrollo económico, si los países que ahora se descarbonizan ya contaminaron todo lo que quisieron hace décadas – pero de ahí a abandonar completamente el acuerdo, va un trecho muy importante. Es lo que va de considerar el acuerdo mejorable o necesitado de ajustes para poder ser considerado éticamente justo, a directamente ignorarlo o, incluso ridiculizarlo.
Donald Trump es el presidente que han elegido los norteamericanos, sí. Pero sus decisiones no solo afectan a su país, sino a la totalidad del planeta. El abandono del acuerdo de París convierte a los Estados Unidos en un país indigno de funcionar como garante de ningún tipo de orden mundial, si es que alguna vez lo fue, y debería forzar a sus aliados a reconsiderar cuidadosamente con quién se alinean. Una superpotencia que boicotea conscientemente y de manera reiterada el objetivo más importante que tenemos como especie y como planeta debería de encontrarse con una contestación adecuada por parte del resto de la comunidad internacional, y si no es así, terminará siendo un verdadero problema, mucho mayor de lo que ya lo es.
El verdadero problema para los Estados Unidos de abandonar el Acuerdo de París es la pérdida de un liderazgo que, hasta ahora, se suponía al menos alineado con los intereses de aquellos a los que llamaba sus socios. Sin contar, por supuesto, con el incremento en la frecuencia de desastres naturales que se está produciendo por culpa de la desestabilización progresiva del clima, de lo que también, tristemente, tenemos numerosos ejemplos recientes. Es el triunfo del populismo más burdo, más triste y asentado en el simplismo y la ignorancia. No lo olvidemos: cuando alguien dice «America First», en realidad está diciendo «… and your shitty country or the rest of the world can go to Hell», y además de manera muy clara y contundente.
Nos vienen cuatro años muy, pero muy malos.
This article is also available in English on my Medium page, «Here’s what Donald Trump is saying as he pulls the US out of the Paris Agreement«
El Acuerdo de Paris es una plaza virtual, dónde entes representativos de colectivos no virtuales se dedican a «perder» el tiempo, debatiendo sobre el futuro de TODA la humanidad… como en su momento fue el Club de Roma… pero más vale perder el tiempo discutiendo, que matándose (otros) peleando…
Eso es lo que no se da entendido cuando los preclaros pensadores de este siglo XXI promueven abandonar calles virtuales como X, porque dicen que en ellas manda un paranoico (mr. muskhyde) mastodente sudafricano… pamplinas, porque las calles reales están tomadas por el poder analógico, para que solo te muevas con su permiso!!!
Eso lo puede hacer el Pato Trump porque tiene el poder de hacerlo. Y más que tendrá gracias al terror que está provocando en la mente de la humanidad planetaria (casi toda). Bien aumentada por esa cámara de eco , que tanto se le critica a las redes sociales.
Los ciudadanos de a pie no tenemos esa capacidad de acción… y por eso, cuando los sacrosantos medios de presión social, sean prensa o ongs se van de X, la abandonan, están haciendo como el Pato Trump, pero al revés, porque están realmente a muchos años luz de su esfera de poder… esos emigrantes son gente que cambió sus neuronas de primera generación por neuronas led, gastan muy poco, pero se pueden apagar más fácilmente… nada que ver con una buena válvula con encendido autónomo. Las originales…
Es lo malo de los chips… deslumbran mucho pero son menos efectivos… (por ahora).
Solo son 4 años. Gracias a Dios por la democracia
El artículo no va de democracia, va de cambio climático. Si el problema de Trump es falta de democracia, no creo que USA vaya a estar peor que Europa viendo los gobernantes que nos gastamos a este lado del Atlántico, empezando por España.
Sí va de democracia, o de lo que algunos creen que es la democracia: otorgar todo el poder al que ha tenido más votos, pero para que actúe como un CEO, sin prácticamente contrapoder alguno. Órdenes ejecutivas a toda marcha, sin someterse a nada ni a nadie, y con el poder omnímodo que tendría un dictador. Populismo, maniqueísmo y simplismo absoluto. Y si no, al tiempo…
Ahora si, no os gusta la democracia?
«Populismo, maniqueísmo y simplismo absoluto». ¿Dónde habré visto esto antes?
«El hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra. El que no conoce su historia está condenado a repetirla.» Y así podríamos seguir.
Cuando el establishment politico, sea en USA o en EU, establece una serie de reglas, sin contar con la ciudadanía, y sin explicar bien el por qué, cuando vienen mal dadas y la ciudadanía lo empieza a pasar mal, culpan al establishment y aparecen los populistas basados en mensajes simples.
De hecho, no es ni nuevo criticar solo a los populistas de determinada tendencia.
Pero a esto lo llaman democracia.
Dicho eso, establecer reglas que hagan que una compañía como Maersk decida no recalar determinados buques en Algeciras pero si a 60 kms en el norte de África (debe ser que allí no nos afecta, gilipuertas que somos), da una idea de lo bien que se piensan las reglas. Así pasa, que cada 2 x 3 tenemos revisiones de las mismas y salidas más o menos temporales de acuerdos.
Eres optimista.
Hay quien dice las próximas elecciones USA será «modeladas» por Trump. ¿Recuerdas aquella frasecita de Trump pidiendo a los «cristianos» que le votaran… que NO tendrían que volver a hacerlo?
Parece que hay ya unos cuantos introduciendo leyes ID para votar y redefiniendo distritos electorales para que todo quede «atao, y bien atao». Creo hasta el clan Trump está metido en esa tarea con Lara, la de cuidado que es de goma.
Dudo que vuelva a haber elecciones limpias en Estados Unidos, a partir de ahora serán elecciones al estilo Rusia donde saldrá elegido siempre Trump o el siguiente candidato conveniente a los oligarcas si es que Trump no vive para las próximos elecciones. En el partido republicano ya están haciendo planes para permitirle más de dos mandatos, y están tomando ya medidas para dinamitar la democracia y convertir el país en una dictadura.
¿Donde está nuestro líder?.- Siguiendo a las masas
Trump sólo trata de liderar un movimiento de resistencia pasiva generalizado al 2030
Las ventas de coches en la UE se mantienen planas en 2024 y las de eléctricos caen un 5,9%
Cuando yo dije, y lo sigo sosteniendo, que el sito Musk era un pedorrán que le importaba un güebo la contaminación climática, y que no era por eso que se había metido a fabricar su cochito eléctrico, pues la prueba está en sus cohetitos de feria que dejan perdido de mierda allí por donde pasan, no lo decía por decir. Así que, ¿no queríais ver el capitalismo en todo su purulento eXplendor? Ahí lo tenéis en esa pareja y en toda su cohorte de adláteres (que son muchos, pero muchos, muchos.)
Ahora bien, también os digo que esta pareja viene del rosario de la aurora, y volverá al rosario de la aurora. Y si no, al tiempo.
“¿no querías ver el capitalismo…?” Mejor el socialismo para hacer a todos iguales?
Disculpa, quién coño habló aquí de socialismo ni leches… Yo es que…
Llámame «cándido», pero yo si creo que, EN UN PRINCIPIO, a Elon Musk le importaba el medio ambiente y la verdadera misión de Tesla era reducir las emisiones de CO2 en la movilidad eléctrica.
Lo que pasa es que a un genio de la ingenieria como Musk se le ha ido la pelota completamente, y de pasar de ser progresista (se definia como demócrata en su momento) a pasado a la extrema derecha como quien cambia de canzoncillos.
Se habrá dado un golpe en la cabeza? No lo se… pero su deriva es evidente, y como deriva, se inició en otro punto, un punto más progre y preocupado por el medio ambiente.
Y respecto a la chatarra espacial, no te preocupes. Si Starlink fracasa, todos sus satélites estan destinados a quemarse en la atmósfera en un razonable plazo de tiempo.
Por lo demás, de acuerdo contigo.
Saludos.
Entre esa posición inicial y lo que tenemos ahora de este esperpento de su etapa inicial, no se que ha pasado ni que ha podido propiciar una deriva tan ilógica como loca.
Enrique, como bien dices, el nuevo rumbo que está tomando el país más poderoso del mundo es una verdadera desgracia. Sin embargo, no sería una mala idea hacer una autocritica. No basta con tener razón sobre el cambio climático sino que también hay que saber vender la idea. En este mismo blog, por ejemplo, ha faltado empatía incluso hacia quienes sí se comprarían un vehículo eléctrico económico pero que no tienen garaje propio. Si tanto propios como ajenos no son vistos más que como unos tontos cuando no hay una coincidencia total o casi total con determinadas premisas, ¿cómo se pretende conseguir suficientes apoyos para salvar el planeta?
Pues viene siendo algo asi…
Desgracia para los que viven de los sueños idílicos en el mundo de yupi.
Desgracia para todo el que no sea fascista (y retrasado). Pero bueno, todo sea para que el Congo (frontera con Arizona) deje de vaciar sus carceles en Estados Unidos, los vecinos inmigrantes no vuelvan a comerse a tu gato, vuelvan a dejar pasar a los barcos estadounidenses por el canal de Panama, se acaben las vacunas y el gobierno deje de provocar catastrofes naturales manipulando el tiempo mientras ríe acariciando a un gatito.
Matt, no seas ingenuo.
Los ignorantes que han votado al fascista son los mas perjudicados por el , pero por eso son ignorantes, por que no lo saben.
Lo ha vuelto a hacer… lo de hace 8 años:
Siempre quedará el buen recuerdo de estas páginas
¡¡ Cuanto odio nos tiene este delincuente fascista !!
PS: Que la vida le devuelva el doble que nos desea
Adicionalmente los grandes millonarios tecnologicos estuvieron presentes en la toma de poder. «Las grandes mentes del mundo», ellos acompañan este proceso. Perdimos nuestros valores y nuestro principios.
Las tecnológicas, esos maravillosos malvados…. Ahora. Porque en las anteriores elecciones no lo eran:
https://emprendedores.es/casos-de-exito/joe-biden-campana-empresas/
completamente deacuerdo (interesante el articulo), siempre han estado y siempre estaran. Sin embargo esta vez estan dando la cara declarando su posción abiertamente.
Debo estar perdiéndome algo…
Una diferencia entre Estados Unidos y España es que Donald Trump SÍ dijo lo que iba a hacer si llegaba a ser presidente. Y después de ganar las elecciones, cuando ya es presidente, lo está haciendo.
Aquí… nadie podía ni imaginar de lo que era capaz Pedro Sánchez.
Otra diferencia es que a lo que está pasando aquí lo llaman democracia, y a lo que está pasando allá lo llaman «la extrema derecha» como poco.
Lo dicho, me estoy perdiendo algo.
Que es mucho más sencillo criticar a Musk o Trump que hacer autocrítica de cómo puede ser que Obama, retirado, haya amasado un patrimonio superior a los 4m$ al año a base de hacer lobby al que le paga y hablar de «políticas» cobrando por ello. O que Bien haya concedido el indulto a toda su familia, empezando por su hijo.
Pero claro, Twitter estaba bien y a cambio X no, a pesar que que sigue funcionando y las noticias se enlazan a comentarios de esa red, y no de la mariposita….
«Aquí… nadie podía ni imaginar de lo que era capaz Pedro Sánchez»
Eso serás tú muchacho…
Además, imagino que te refieres a las medidas que han sido polémicas, y no a las otras miles de medidas mucho más importantes (y correctas) que no han copado titulares. Vamos, que no os enteráis ni del nodo.
La UE se convertirá en los estados Unidos de Europa o iremos como patriotas nacionalistas por libre. Las potencias lo tienen fácil con nuestros melonis. Esa y no otra es una de las claves que puede salvar al mundo.
Dejando aparte las cuestiones políticas (Trump ha ganado diciendo claramente qué iba a hacer, pero con los mismos votos de antes. Kamala ha perdido porque quería ser votada por ser lo que es -negra, india, mujer- y no por su programa y perdiendo una montaña de votos. No ha ganado Trump, ha perdido Kamala).
Dentro de cuatro años saldrán de su encierro y se encontrarán que los chinos se han hecho con el mercado sudamericano al completo y con gran parte del mundial en pugna con europeos y japoneses. Se encontrarán con un mundo que ya no quiere ni sus automóviles ni su gas/petróleo; lo mismo que les pasará a rusos e iraníes, que para cuando espabilen se van a encontrar con un mundo que ya no quiere su petróleo.
Con un poco de suerte, Europa aceptará que su bienestar no puede depender de la protección del primo norteamericano y ¡ojalá mis ojos lo vean! quizás avancemos hacia una mayor unión política.
Van a despertar en un mundo que les habrá pasado por ambos lados mientras siguen pensando que son la mayor potencia mundial simplemente porque tienen a los mayores multimillonarios mientras siguen teniendo la peor calidad de vida de los países del primer mundo. Porque lo del mayor ejército del mundo… dales diez años a los chinos y veremos.
Para llegar a eso tiene que calar el relato europeo en las mentes de los jovenes, el problema es que el relato no sólo no existe si no que el que crece es el contrario.
Bueno, entonces Europa, como la orquesta del Titanic, desaparecerá cantando alegremente camino de la irrelevancia invadida por los nuevos bárbaros. Con suerte no llegaré a ver ese futuro.
Habrá que confiar en los polacos.
Completamente de acuerdo contigo, Enrique.
Me imagino que tanto yo, como muchos de los que asistimos desde la TV a los fastos de la proclamación, nos quedamos boquiabiertos ante lo que estábamos escuchando. No dijo nada nuevo, pues sus mensajes ya nos llegaron durante toda la campaña electoral, y además ya conocemos al personaje. Pero lo que si me alarmó fue el tono con que lo decía: sonaba a venganza y a amenaza, dirigidas a los que el considera sus enemigos: los demócratas, los inmigrantes, los chinos, y los jueces. Me echasteis de a Presidencia, y he vuelto. Me quisisteis encerrar y puede que yo os encierre a vosotros. Se acabó vuestro tiempo y ahora comienza el mío, nos vino a decir.
En la situación actual en la que se encuentra hoy nuestro mundo, la llegada a la Casa Blanca de Donald Trump es lo peor que nos ha podido ocurrir. De entrada, anoche ya firmo la Orden Ejecutiva por la que retira a los EE UU del Acuerdo de París, primera consecuencia de su negacionismo climático. Ni mil lobistas pudieron acabar con este acuerdo de 2015 en París, y Trump lo acaba de mandar a la papelera de un plumazo, y nunca mejor dicho.
Nos recordó que «iba a perforar, perforar y perforar, para que todos dispusiéramos del petroleo y gas baratos que necesitamos». Afirmó que los americanos podrían a partir de ahora comprarse el coche que quisieran, en alusión a la recomendación de no adquirir coches eléctricos. Sabemos por otro lado de su ambición expansionista hacia el norte -Canadá y Groenlandia- por su interés en explotar los recursos mineros de ese área, mientras que el ser humano permanece en la cola, pero no por ello fuera del alcance de sus decisiones, y si no que se lo pregunten a los inmigrantes.
Pero ayer no solo sacó a los EE UU del Acuerdo de París, se retira también del Acuerdo Fiscal Global firmado con la OCDE, se retira así mismo de la OMS, la Organización Mundial de la Salud y con ello se van los 130 millones de dólares que los EE UU aportan a la Organización, retira los compromisos financieros asumidos en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, y revoca de inmediato el Plan Internacional de Financiación Climática de Estados Unidos, su Orden Ejecutiva nº 19 sobre energía titulada “Liberar la energía estadounidense” ordena una revisión inmediata de las actividades de las agencias que “potencialmente suponen una carga” para el desarrollo de los recursos energéticos nacionales, en particular “el gas natural, el carbón, la energía hidroeléctrica, los biocombustibles, los recursos minerales críticos y la energía nuclear”. Después de un mes, las agencias deben tener planes de acción para contrarrestar las normas anteriores que obstaculizan el desarrollo energético. La orden también revoca 12 acciones regulatorias de la era Biden relacionadas con las iniciativas de energía limpia y ordena a las agencias federales que “pausen de inmediato” el desembolso de fondos de la Ley de Reducción de la Inflación, una ley de la era Biden que otorgó miles de millones de dólares en subsidios a las iniciativas de energía limpia.
Su Orden Ejecutiva nº 29 que declara la existencia de «Una emergencia Nacional», y que lleva por título “Declaración de una emergencia energética nacional”, citando la necesidad de reducir los costos de la energía como una razón para impulsar la producción de petróleo y gas natural en todo el país. La orden exige una revisión de los “obstáculos a la infraestructura energética nacional” resultantes de las protecciones ambientales legales como la Ley de Especies en Peligro de Extinción. Sería algo así como considerar en España que la preservación de Doñana es un obstáculo para poder perforar en busca de petróleo.
Mediante el Memorando nº 28 titulado “Retiro temporal de todas las áreas de la plataforma continental exterior del arrendamiento de energía eólica marina y revisión de las prácticas de arrendamiento y permisos del gobierno federal para proyectos eólicos”. Esto incluye la pausa en el desarrollo del proyecto eólico Lava Ridge en Idaho por parte de Magic Valley Energy. La orden está en línea con los ataques de Trump a las energías renovables y las promesas de campaña de impulsar la industria del petróleo y el gas natural.
Mediante la Orden Ejecutiva nº 33, Trump deroga las protecciones ambientales de la era Biden y promueve la extracción de recursos en Alaska. La Orden lleva por título “Liberar el extraordinario potencial de recursos de Alaska” y revierte una serie de restricciones a la perforación y extracción en Alaska establecidas por la Administración Biden, que incluían la protección de áreas dentro del Refugio Nacional de Vida Silvestre del Ártico contra el arrendamiento de petróleo y gas, para promover la extracción de petróleo, gas y otros recursos del estado de Alaska.
Estas son las ordenes emitidas en lo que se refiere a lo que afecta al cambio climático, a la presencia del país en organismos internacionales y su la retirada de ciertos acuerdos internacionales firmados, y esto solo es el primer día.
Aún nos quedan cuatro años de decisiones enfocadas a mantener la supremacía de los EE UU sobre el resto del mundo para seguir ¿liderando? el planeta a su antojo. ¿Alguien tiene alguna duda sobre esto?