Los límites del anonimato

SkanksinNYCEl caso de Liskula Cohen, una modelo canadiense residente en Nueva York que fue reiteradamente insultada en un blog creado especialmente para ello, «Skanks in NYC», nos lleva a una discusión permanente en la historia de la web: la aplicabilidad de unas leyes que nunca fueron diseñadas para un entorno electrónico, y los límites de cuestiones como la libertad y el anonimato.

El blog en cuestión, alojado en Blogger, tenía únicamente cinco entradas, todas fechadas hace ahora exactamente un año, el 21 de Agosto de 2008, todas ellas anónimas y de naturaleza clara y abiertamente difamatoria hacia la modelo. Ahora, un juez ha obligado a Google a entregar todos los datos que posea, tales como dirección IP o correo electrónico, que puedan conducir a una identificación del autor del blog, con el fin de proceder posteriormente a un juicio en el que puedan depurarse las correspondientes responsabilidades. El autor, que ha retirado la página y contratado un abogado, ha intentado escurrir el bulto arguyendo un uso supuestamente retórico y cómico, que obviamente no ha convencido al juez: defender que textos como «psychotic, lying, whoring still going to clubs at her age, skank» son de naturaleza humorística y no difamatoria es algo que tiene sus dificultades.

¿Significa ésto, como han comentado algunos artículos, el fin del anonimato en Internet? En mi opinión, no es así. Internet permite, obviamente, un nivel de anonimato mayor que aquel al que estábamos acostumbrados antes de su popularización. La red puede hacer muy difícil identificar al autor de algo, pero eso no significa una patente de corso para que ese autor pueda hacer lo que buenamente quiera o esté al margen de la ley. El anonimato es, desde mi punto de vista, un derecho fundamental de las personas y en muchas ocasiones, como en el caso de regímenes políticos de naturaleza opresora o liberticida, una muy buena recomendación. Pero los derechos tienen sus límites, y normalmente esos límites suelen estar donde entran en conflicto con los derechos de otros. Una cosa es usar el anonimato para expresar opiniones, y otra hacerlo para acosar a una persona en concreto y perjudicar su reputación de manera directa (en este caso, la modelo afirma haber perdido contratos de representación de marcas debido a la imagen que este blog estaba proyectando sobre ella).

Los límites de delitos como el libelo y la difamación están presentes y claros en la mayoría de los ordenamientos jurídicos – o al menos, todo lo clara que puede llegar a ser su determinación, que se basa en demostrar cuándo la opinión deja de serlo y pasa a ser declarativa de unos hechos que se afirman reales – desde mucho antes de existir Internet. Internet no está al margen de la ley, simplemente precisa, en muchos casos, a la adaptación de las leyes para que éstas puedan mantener su naturaleza en su contexto. Una difamación, un libelo o un acoso lo son igual dentro de Internet y fuera de Internet. Internet no está al margen de la ley ni sería nada bueno que lo estuviese. En Internet, algunos aspectos pueden tener factores diferenciales, estar sujetos a efectos Streisand más o menos marcados, incrementar la dificultad de la identificación del autor o someter los hechos a problemas derivados del ámbito de la territorialidad, pero eso no quiere decir que no sean delitos y deban ser perseguidos en la medida de lo que resulte posible y razonable. En este caso, que Google revele los datos que posea del autor es algo completamente lógico dado que le está siendo solicitado por un juez, y Google, como cualquier otro, tiene que someterse al ordenamiento jurídico correspondiente.

El anonimato debe seguir siendo un derecho en Internet. Pero con todo derecho, viene la obligación de ejercerlo con responsabilidad. El caso «Skanks in NYC» tiene, desde mi punto de vista, muy poco que ver con Internet: es un simple caso de difamación que debe ser juzgado con arreglo a las leyes que regulan el delito de difamación.

29 comentarios

  • #001
    devly - 21 agosto 2009 - 12:49

    No solo se trata de derechos, en mi opinion tb se trata de justicia. Muchas cosas no se dicen por miedo a los abogados, muchas cosas no salen a la luz porque sabes qeu si te metes con quien tiene dinero te espran muchos dias de no dormir.

    hay que entender que lo que se lee en un blog anonimo no tiene mas valided que una pintada en la parez, pero en ocasioens en bueno leer las pintadas en las pareces, te puedes enterar de cosas que no sabias.

    Para mi si se pierde el anonimato en internet, no que que nos queda a los que no podemos pagar un abogado para expresarnos sin miedo a represarias.

  • #002
    devly - 21 agosto 2009 - 13:02

    pd; en este pais la mentira se castiga, pero no tanto como la verdad…

  • #003
    Enrique Dans - 21 agosto 2009 - 13:05

    #1: El principal problema, de hecho, no viene de la naturaleza de Internet, sino de la naturaleza de la justicia. Una justicia que para funcionar tiene que ser carísima no es justicia, porque determina que unos puedan acceder a ella mientras que otros no puedan.

  • #004
    jon - 21 agosto 2009 - 13:06

    Puedo estar de acuerdo en que el anonimato en Internet es necesario, pero debe haber límites, los límites son bastante claros, si yo con mis comentarios estoy injuriando a alguien o estoy difamando a alguien deja de ser solo una opinión y me arriesgo a tener que responder judicialmente por ello. El anonimato en Internet tiene ese límite al igual que todos aquellos que se puedan considerar delitos por la legislación vigente en cada país.
    En España por ejemplo es la Ley 25/2007 de 18 de octubre, de conservación de datos relativos a las comunicaciones electrónicas y a las redes públicas de comunicaciones la que obliga con carácter general a solicitar autorización judicial para conseguir la dirección de IP. La dirección IP en España se considera dato personal cuando está vinculada a una persona física, ya que en la mayoría de los casos se puede saber quien es el titular de esa dirección IP.

  • #005
    cristiansan - 21 agosto 2009 - 13:06

    Si «normalmente esos límites suelen estar donde entran en conflicto con los derechos de otros» la prensa Rosa (Mayoritariamente) debería desaparecer, puesto que no suelen aplicar estos limites… que yo sepa… si esto no se aplica en la prensa, que esta mas al alcance de todo el mundo.. debe aplicarse esto a Internet?

    entiendo que mientras esta premisa no se aplica a los medios de comunicación, no puede tomarse para ser aplicada a los internautas, puesto que además, los medios de comunicación, al menos por el momento, como la TV, tienen un poder mayor sobre la opinion social.

  • #006
    cristiansan - 21 agosto 2009 - 13:08

    Por cierto, estoy contigo en cuanto a Internet no debe estar fuera de ley.

  • #007
    jummp - 21 agosto 2009 - 13:17

    La libertad de expresión tiene sus límites que son los que marca la Ley, independientemente del medio utilizado. ¿Qué en este caso es Internet? Pues si se han sobrepasado los límites veo correcto que se apliquen las medidas legales/judiciales correspondientes.

  • #008
    Milhaud - 21 agosto 2009 - 13:18

    Gran entrada, pero más aún me ha gustado tu último comentario en el que dices la gran verdad de todo: «Una justicia que para funcionar tiene que ser carísima, no es justicia».

    Y ese es uno de los grandes lastres de nuestra sociedad, el elitismo que deja indefenso a los que no tienen medios.

  • #009
    kylekatarn - 21 agosto 2009 - 13:42

    Have you ever heard about the basic human right to privacy and anonymity?

    We have the right to blog anonymous, stay anonymous, using and abusing free speech.

    Don’t fool your readers with «laws» and «responsibilities». Don’t promote CENSORSHIP and TYRANNY.

    http://www.eff.org
    http://www.chillingeffects.org/
    http://wikileaks.org/ ;)

  • #010
    Gorki - 21 agosto 2009 - 13:52

    De todas formas si eres razonablemente prudente el anonimato existe en internet, el dar una direccion IP no es dar el nombre de un señor.

    Si yo quisiera hacer la majadería de difamar a alguien con un blog, prepararia las cosas en casa y las subiria con un pen en cualquier cibercafe, o con un protatil en un hostpot, nunca se me ocurriria hacerlo desde una conexion fija.

    Esa internauta, ha demostrado ser a la vez un bellaco y un pardilllo.

  • #011
    federico - 21 agosto 2009 - 14:10

    Pienso que lo anónimo nunca es bonito y en ocasiones –no siempre- implica cobardía. Por otro lado no tenemos que tener miedo al decir lo que pensamos, lo único que debemos medir son las formas y modos.

  • #012
    Belén - 21 agosto 2009 - 14:13

    Muy interesante la entrada y el trasfondo que tiene. El debate de siempre se complica con las posibilidides que da internet. Da para un libro y todo.

  • #013
    Overflow - 21 agosto 2009 - 14:34

    12# Belén: “[El post] Da para un libro y todo”

    Ese libro existe y lo recomendó Enrique junto a un enlace para su descarga: “El Código 2.0” de Lawrence Lessing.

    http://www.traficantes.net/index.php/trafis/editorial/catalogo/coleccion_mapas/el_codigo_2_0

    Para quienes les interese el tema del actual post, dicho libro yo lo catalogaría como una referencia imprescindible.

  • #014

    [Textual] «El caso “Skanks in NYC” tiene, desde mi punto de vista, muy poco que ver con Internet: es un simple caso de difamación que debe ser juzgado con arreglo a las leyes que regulan el delito de difamación.»

    Enrique: todo lo que pasa en Internet tiene que ver con internet.

    De hecho todo lo que dices que se hizo, así se hizo porque exitía la web.

  • #015
    Gorki - 21 agosto 2009 - 16:39

    Algo que dificulta la aplicación de la justicia en Internet es la extraterritorialidad de Internet, las leyes solo tiene validez en un territorio e Internet no esta unida a ningún territorio..

    ¿Por qué Internet ha de aceptar los mandatos de un juea norteamericano?, La difamación suele estar penado en todos los sitios, pero quizá, en Norteamerica lo esté con carcel, en otros sitios con una multa y en Arabia con latigazos. Por qué aplicar las leyes norteamericanas al caso y no, pongo por caso la sueca?

    Supongamos que se hubiera criticado a Fidel Castro, algo penado en Cuba, ¿Diríamos lo mismo si un juez cubano pidiera a Google la IP del infractor de la ley cubana?

  • #016
    Alejo - 21 agosto 2009 - 19:02

    En Colombia nos quieren quitar el derecho a la libre expresion, como siempre leyes absurdas:
    http://www.eltiempo.com/colombia/politica/presentan-proyecto-de-ley-que-exige-identificacion-plena-de-foristas-en-paginas-en-internet_5860207-1

  • #017
    Raquel Morente - 21 agosto 2009 - 19:36

    Para mi esto es internet http://www.youtube.com/watch?v=gKwk8Kq8QXA . Podemos decir lo que pensamos, por eso cuando leo artículos como este o como el de la censura o que usen las redes sociales para valorarnos pienso que el ser humano es capaz de hacer que un descubrimiento como este que es de gran ayuda para la sociedad a todos lo niveles se tenga que regular. Si nadie pusiera pornografía infantil, ni difamara a otras personas etc tendríamos un medio para poder ser quienes somo, aquí los buenos siguen siendo buenos y los malos malos, así es la naturaleza humana y como en la vida real tendrán que regular y legislar nuestra vida virtual.

  • #018
    Alejandro Delgado - 21 agosto 2009 - 19:56

    Muy buen post Enrique. Es necesario incrementar las posibilidades de identificación del difamador, pero sin llegar a los extremos que estamos viendo en Colombia.

    Al respecto, ver: http://alejandrodelgadomoreno.com/2009/08/si-la-libertad-de-expresion-en-colombia.html

  • #019
    Gorki - 21 agosto 2009 - 20:33

    #18 Alejandro Delgado
    Por desgracia esa es la norma en los políticos, (y muchos jueces), de casi todo el mundo, perseguir más al mensajero que a quien escribe el mensaje.

    Suponiendo que esa norma fuera recíproca. ¿Que tendría que haber hecho eDans contigo? -. Comprobar que tu documento de identificación era correcto , ¿cómo desde España?, o no dejarte participar por si acaso,

    Desgraciadamente, en su gran mayoría, quienes se empeñan en legislar para Internet o son tontos de baba, o desconecen absolutamente el medio. Uno se pregunta si vuestro senador habrá escrito un e.mail alguna vez en se vida, o lo hace su secretaria.

  • #020
    eblanko - 21 agosto 2009 - 20:58

    Sobre el mismo caso doy algunas posibles pistas jurídicas (ex ordenamiento español) en uno de mis post. A mí me sorprendió mucho y abre un debate que, en España presenta unos de los conflictos más dificultosos en cuanto a choque de bienes jurídicos protegidos.

    http://eblanko.wordpress.com/2009/08/19/pistas-juridicas-para-bloggeros/

    Un saludo

  • #021
    Belén - 21 agosto 2009 - 21:45

    @Overflow Gracias por recordármelo. Lo tenía descargado pero como descargo tantas cosas a lo largo del día, acabé por olvidarlo.

    @Gorki La competencia para juzgarlo y la ley aplicable están requete determinados por convenios y tratados internacionales. Se tardan 4 meses en entender -a medias- en la carrera, así que no lo voy a explicar aquí. Es complicado pero no es una laguna.

  • #022
    Krigan - 21 agosto 2009 - 23:45

    Si la revelación de identidad se produjo por orden judicial no sé dónde está el problema. Una de 2, o consideramos la difamación como un delito, o no lo hacemos. En el primer caso (que es el de la ley actual), que un juez dé tal orden no es sino un acto ajustado a derecho. En el segundo caso, estaríamos despenalizando la difamación, y cualquiera que apoye tal cosa que no se queje luego si le difaman a él o a un ser querido.

    Las órdenes judiciales no se regalan en los paquetes de cereales, ni se dan por motivos banales, pensar que esto es el fin del anonimato en Internet es absurdo.

    Lo que no sé es porqué este caso es noticia. Creo que esta es la cuestión a analizar, porque en lo que se refiere a la ley, no es sino una aplicación perfectamente normal de la misma.

  • #023
    PierreLeroy - 21 agosto 2009 - 23:51

    ¿Qué sería de Internet sin la libertad de expresión?, para mi dejaría de ser Internet.

  • #024
    paloma - 22 agosto 2009 - 00:40

    Me ha parecido muy bueno el post y me han surgido los siguientes comentarios

    Hablais de que una justicia cara no es justicia , pero yo ya no creo que sea tema de precios , creo que mas bien es problema de foormacion en tecnologia de nuestro sistema judicial , y ahi volvemos a que el problema es la falta de formacion que existe en las nuevas tecnologias

    Por otro lado todo lo que esta pasando no es mas de lo que ha estado pasando en nuestro pais muchismo tiempo que es el mal meter contra los otros solo que ahora se nos facilita la amplitud de nuestros temas

  • #025
    Enrique Jerez - 22 agosto 2009 - 09:28

    #10 desde luego que la entrada da para un libro. Pero me asalta una duda con respecto a las responsabilidades: si las entradas del blog se hubieran publicado desde un hotspot o un ciber, ante la ley quien responde? Porque el anonimato del autor esta practicamente asegurado.
    Por ejemplo, conozco de primera mano el un caso en el que un encargado de un centro de acceso publico a internet fue requerido por orden judicial para resonder precisamente por eso, porque desde la ip de la conexion que él mantenia ( ni siquiera estaba a su nombre) se habian publicado insultos y amenazas.

  • #026
    Alejandro Lloro - 22 agosto 2009 - 12:26

    Enrique has dado en el clavo tanto con el artículo como en el comentario #3. Hay una frase que a mi me gusta mucho y que es totalmente aplicable a internet: » La libertad de una persona termina donde comienza la de la persona que tiene al lado». Es decir, todos podemos/debemos opinar de forma libre, pero siempre respetando a los demás. Y en este caso no se produjo el respeto al prójimo y por tanto veo correcto que se recurra a la justicia para evitar que se siga produciendo el hecho.

  • #027
    Anisótropo - 22 agosto 2009 - 13:15

    De todos modos: ¿alguien con dos dedos de frente podría llegar a tomarse en serio ese blog (un blog hecho exclusivamente para criticar a una persona)? Si quisiera conocer las últimas noticias sobre la vida privada de dicha modelo, lo más lógico sería acudir a uno de los sitios web más conocidos (es decir, con mayor número de visitas) sobre cotilleos (o, dicho con un eufemismo: de crónica social).

    También es cierto que asociar la credibilidad de un sitio web por el número de visitas sería el equivalente a decir que el ya desaparecido programa de TV «Aquí Hay Tomate» era el mejor de su género. Lo bueno es que en internet, a diferencia de la TV, se pueden depurar continuamente las herramientas de catalogación y selección de la información (la labor principal de Google). Por ejemplo, puedo hacer un ranking personalizado sobre sitios web de tecnología (por ejemplo) a partir de los marcadores de Delicious.com de gente que conozco y que confío en su criterio (no estoy seguro de si se puede hacer eso, pero creo que estaría bien tener una herramienta así).

    Lo que está claro es que internet es la herramienta que está produciendo la mayor revolución social de los últimos tiempos. Eso hace que se tambalee la estabilidad de que hemos gozado en occidente durante los últimos 50 años y se nos plantean grandes dilemas, como el de el modo de distribuir el conocimiento (incluida la cultura). Otro del que no se habla tanto, porque nos parece de ciencia-ficción (y, por tanto, de un futuro muy lejano), aunque puede que no sea así, es sobre el uso de herramientas de software para ciertos servicios. Quizás en un futuro no muy lejano la tarea de los jueces, en vez de consistir en aplicar la ley, sea la de crear software que aplique la ley. Sé que es muy controvertido, pero la justicia tampoco es perfecta hoy en día, y con que ese software alcance un nivel de perfección aceptable y sea supervisado por los jueces, eso ya nos ahorra tiempo y esfuerzo.

  • #028
    Belén - 22 agosto 2009 - 17:54

    #25 Responde el individuo, no el dueño del ciber. De hecho, ya ha ocurrido con casos de descargas de contenidos con SGAE y cía. que no se ha podido imputar al que no se podía demostrar que era el único usuario de una IP. Ten en cuenta que hace falta encontrar un nexo cierto, no un simple indicio, así que cualquier fiscal en su sano juicio se opondría a que se abriera causa contra alguien que no tiene nada que ver con los hechos.

    Por ejemplo, el caso del chico que subió vídeos sexuales de su exnovia, desde un ciber, fue, obviamente, el responsable.

    De todas formas, sobre todo fuera de España, aunque aquí cada vez más también, los cibers y sitios de conexión pública están cada vez más controlados con CCTV, así que es fácil identificar quién ha pasado por delante de la cámara de seguridad a la hora en que fue cometido el delito, con una mínima investigación policial.

  • #029
    jftamames - 24 agosto 2009 - 15:37

    La cuestión, Dans, no es lo cara que sea la justicia. Nadie puede discutir que tengamos mejores o peores accesos a la educación porque no todos los profesores pueden cobrar igual.
    La cuestión es que sólo sea el dinero el que marque la diferencia y eso ocurre con ciertos colegios: pago mucho no por el profesorado sino para relacionarme sólo con los que tienen éxito económico.
    Lo malo sería que sólo los buenos abogados sean los caros, esto es, que las grandes firmas sean las que tienen el oligopolio. Mientras las instituciones permitan que cualquier abogado pueda defender cualquier caso, los que aspiran a ser los mejores, durante bastantes años serán baratos. Esa retroalimentación del sistema depende de que los jueces ejerzan como poder constitucional, esto es, que se les controle en su capacidad de ser corrompidos.

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