IE Business School, la mejor escuela de negocios europea

Empecé a trabajar en IE Business School hace ya veintidós años, en septiembre de 1990. Había terminado mi MBA allí mismo hacía pocos meses, y me había metido en ese lío sin estar completamente seguro de ello: uno de mis mejores y más queridos profesores durante el curso, Jose Mario Álvarez de Novales, me había convencido de que yo podía funcionar bien como profesor allí, y que aunque no era normal incorporarse al claustro recién salido del MBA, no debía preocuparme porque lo haría bien. Así que, a pesar de que personalmente había descartado la docencia cuando salí de la universidad, probé. En aquel momento, IE Business School, conocida entonces como Instituto de Empresa, eran tan solo dos edificios en la calle María de Molina, en pleno centro de Madrid.

Veintidós años después, el ranking más prestigioso de nuestra industria, el del Financial Times, nos califica como la mejor escuela de negocios de Europa (ver revista completa en pdf). No en un programa o categoría concreto, sino en su informe anual en el que promedia los resultados obtenidos por las principales escuelas de negocios europeas en los rankings parciales de programas MBA, Executive MBA, Masters in Management y cursos de Executive Education. En el importante. Con una metodología impecable, que incluye no creerse nada de lo que como institución les cuentes, sino investigarlo todo por sí mismos, a partir de encuestas a alumnos, ex-alumnos, empresas, etc. Sin posibles comentarios descalificatorios ni sospechas de nada, porque hablamos de un trabajo periodístico complejo, una metodología aceptada como imparcial, y un resultado coherente que deja dos evidencias claras: una, lo importante no es estar arriba de todo (aunque sea una maravilla), sino mantenerse ahí, estar siempre en la zona superior. Y dos, la educación de postgrado en España goza de muy buena salud – tres escuelas españolas en el top ten) y es una de esas industrias de las que, en estos tiempos de crisis en que parece que todo va mal, debemos presumir como país.

Hoy no hablo de tecnología. O sí, porque la tecnología ha sido una parte muy importante en que las cosas en esta institución hayan salido y sigan saliendo como están saliendo. Pero como espectador privilegiado y modesto participante en el cambio que hemos vivido en IE Business School a lo largo de estos años, no quería dejar pasar la oportunidad de comentarlo. Es una de esas entradas que si no escribes, no te sientes a gusto, y después de todo, esta página nunca ha dejado de ser un blog personal. Hablo de la escuela en la que me formé, de la que invirtió y arriesgó pagando mi doctorado, y en la que me he dejado las pestañas dando clase, evolucionando como profesional y persona: no me pidáis que sea objetivo. De una escuela en la que me encuentro a gusto porque siento que valora lo que hago, porque noto que los temas a los que me dedico y que predico constantemente son importantes y deben ser tratados como estratégicos. Que me da una libertad de cátedra que muchos consideran envidiable y otros llegan incluso a considerar una amenaza. Que considera al cliente como una obsesión, y en la que las encuestas de satisfacción determinan de manera clarísima qué profesores seguimos dando clase, cuáles no lo vuelven a hacer sin pasar por procesos de formación, o cuáles deben dejar de hacerlo. En una escuela que cuando empecé estaba en dos edificios, y hoy tiene dieciocho locales en el barrio de Salamanca en pleno centro de Madrid, algunos de ellos edificios enteros de ocho plantas, un campus en Segovia con una iglesia gótica en su interior que usamos como Aula Magna y que alberga el que para mí es el mejor y más provocativo proyecto de educación universitaria de nuestro país, un campus online hiperactivo e ilimitado, y clubs de antiguos alumnos en todo el mundo. No siempre eres consciente de los cambios en la empresa que trabajas cuando estás metido en su día a día. En el caso del IE, sí. La ves cambiar y evolucionar todos los días. Hacemos programas nuevos, estructuras nuevas, cosas distintas

 

 

Se me ocurren mil cosas que cambiaría en el IE. Si dependiera de mí, haría que algunas evoluciones fueran más rápidas, fiaría muchos más temas a la adopción de nuevas herramientas, habría cosas a las que daría menos importancia, otras a las que les daría más… y seguramente me equivocaría. Las decisiones en la empresa en la que trabajo nunca han estado especialmente centralizadas. Siempre he tenido la impresión de que me pedían opinión para aquello en lo que podía tener algo que aportar, a pesar de mi insistencia por no ser directivo y centrarme en mi labor como profesor. Trabajar en el IE es agradable, porque no tiene una cultura estructurada ni jerárquica. No hay «usted», no hay miedos reverenciales, o puestos vitalicios. Ya no es como cuando entré y nos reuníamos todos cada viernes por la mañana en un aula de tamaño medio, ahora te cruzas constantemente por el campus con personas que no conoces… pero se mantiene un «clima de empresa pequeña sin serlo», de poca burocracia considerando que somos un montón y muy difíciles de gestionar. Una escuela completamente independiente, no vinculada a ningún grupo religioso ni político, en la que tienes compañeros con todo tipo de creencias en absolutamente todos los sentidos, y en la que cada clase parece una asamblea de la ONU. La verdad: un gusto.

Ahora viene el saborear el tema. En veintidós años tienes tiempo de conocer el sitio, de que te salgan canas, y de que quien se convirtió en tu mentor se vaya y lo eches muchísimo de menos. Ahora es cuando te empiezas a dar cuenta de que te vienes a Limerick a una charla de la EFMD, y de repente pasas de tener una charla ordinaria a hacer la plenaria de apertura, y que todo el mundo habla contigo porque estás en la escuela que está ahí, arriba de todo en el ranking, en la que se supone que algo estaremos haciendo diferente. Cuando llegué a UCLA en 1996 para hacer mi doctorado, a algunos de mis profesores no les sonaba conocida la escuela en la que trabajaba. Cuando me fui en el 2000, ya habíamos aparecido en algunos rankings y ya nos tenían situados. Ahora, todos en la industria saben quiénes somos y dónde estamos, e intuyen que algo estamos haciendo bien.

No es mal momento para parafrasear la frase final de «Memorias de África«:

«A Jose Mario le encantará saberlo. Tengo que acordarme de decírselo».

30 comentarios

  • #001
    Antonio J. Roldan - 5 diciembre 2012 - 11:29

    Sin duda que es la mejor educación que puedes recibir en España… siempre y cuando tus progenitores puedan permitírsela.

    Seamos sinceros, aproximadamente el 80% de los estudiantes de esta escuela, no de los Programas Executive (que son peces gordos de la industria), pueden acceder a ella gracias a que sus padres tuvieron la suerte o la hacienda de poder regalar la mejor educación a sus hijos y así sucesivamente en un ciclo que restringe, separa y mantiene el orden social del yo arriba y tú abajo.

    Y, ¡Ojo! No estoy intentando mancillar el excelente artículo de Enrique Dans. Ojalá yo pudiera degustar las maravillas de un Executive allá, viviendo a tan solo dos paradas de metro de esos edificios del barrio de Salamanca.

    Rompo una lanza a favor de la educación de calidad…para todos. Y si el señor Enrique Dans me regala una beca para cursarlo y proclamar al mundo las bondades de esta escuela, será gratamente bienvenida.

    Un saludo,

  • #002
    Ferran Muñoz - 5 diciembre 2012 - 11:30

    Enhorabuena por la trayectoria Enrique. Siempre digo que pagaría por estar ni que sea en una de tus clases, ya que el ambiente que se tiene que respirar, tal y como lo describes, es de lo mejor que puede haber. Ese aire fresco a innovación, a tecnología, a know-how y métodos eficientes de trabajo…

    No es por ser pelota (ni mucho menos), pero oye, veintidós años en el IE Business School no se dicen todos los días.

    Saludos!

  • #003
    Enrique Dans - 5 diciembre 2012 - 11:52

    #001: Ni te imaginas hasta qué punto te equivocas. Nada que ver. La inmensa mayoría de los estudiantes en el IE llegan a él como llegué yo: con un crédito encima. Los créditos te los dan fácilmente porque los bancos saben que cuando haces el master, te conviertes en buen pagador. Año de carencia, y a pagar con tu sueldo como un campeón. Yo pedí el crédito en 1989, hice el MBA en el 89-90, y lo terminé de pagar religiosamente en 1994… ¡un crédito al 12%, que en aquel entonces era barato!!! :-)

    Pásate por una clase, y verás. Muchas personas que han estado varios años trabajando y han ahorrado para ello, muchos que se han pedido un crédito… ¡de todo! Habrá quien tiene dinero de familia, pero no más que en cualquier otra universidad o institución educativa, te lo aseguro. Eso de «los niños de papá» es un mito absurdo que cuentan personas que no han puesto un pie en el IE en su vida.

    ¿Becas? Las hay, y muy buenas. Pero no «las regalamos», ni mucho menos tengo yo nada que ver en el tema, me temo.

    #002: Ferrán, ponme un correo y «te cuelo» en alguna sesión cuando quieras ;-)

  • #004
    Javier Vendrell - 5 diciembre 2012 - 12:02

    Completamente de acuerdo con la opinión #001. Tengo un hermano que cursó hace un tiempo un programa MBA del que quedó plenamente satisfecho. El MBA lo pagaron mis padres con mucho esfuerzo y, como suele ocurrir, no hay recursos familiares para poder pagar otro MBA, en este caso a mí, y con la que está cayendo ahora es muy complicado poder abonar los más de 30000 euros que cuesta un programa.

    Personalmente admiro tanto a Enrique Dans, del que soy un acérrimo seguidor, como a IE Business School (por las referencias que me da mi hermano), pero creo que con unos precios tan elevados se consiguen dos cosas:

    – dejar fuera del programa a personas con un gran talento y que, económicamente, no están ni en la franja de «los ricos» (que pueden pagarlo sin pestañear) ni en la franja de «los pobres» (que pueden optar a beca)
    – Hacer que las élites de casta sigan siendo tan altas y las clases bajas sigan sin optar a formación de calidad. s decir, no cambiar el mundo a través de la vertiente social.

    Quizá este equivocado en algunos de mis planteamientos. En ese caso, estaré encantado de ser corregido. Y, por supuesto, felicitar tanto a Enrique como a IE Business School por su excelente trabajo. ¡Y que cumplas muchos más!

    Un saludo

  • #005
    Luciano - 5 diciembre 2012 - 12:03

    A sacar pecho.

  • #006
    Enrique Dans - 5 diciembre 2012 - 12:09

    #004: Nada que ver. Las becas del IE no tienen nada que ver con las públicas, en las que hay que «ser pobre» para conseguirlas. Se dan a quien se piensa que es bueno que haga el programa, punto. No analices con mentalidad española, los precios son elevados porque no tienen nada que ver con el mercado español, que de hecho no es nuestro mercado (los españoles, en muchas de mis clases, no son siquiera el grupo de alumnos mayoritario). Si comparas los precios de los masters del IE con los de las escuelas que la rodean en el ranking, verás qué sorpresa más interesante te llevas. Si los comparas con la matrícula de la universidad española, o con los «masters» que hacen las universidades españolas, lógicamente te parecerán caros, pero es que hablamos de un producto diferente en todos los sentidos. Pero compáralo con el precio del MBA de una escuela norteamericana, pon las cosas en su adecuado contexto, y luego hablamos. Ese es nuestro mercado, ahí es donde competimos.

  • #007
    Javier Vendrell - 5 diciembre 2012 - 12:13

    #006: Estupendo, Enrique. Muchas gracias por tus aclaraciones. Espero no haberte ofendido, probablemente he utilizado el «cliché». Estaré encantado de investigar más sobre el tema y, quien sabe, ojalá en un futuro nos podamos encontrar en persona, como profesor-alumno :-)

    Nuevamente, gracias por los comentarios y por hacer de esta «pequeña comunidad» un punto de encuentro muy acogedor.

    Un saudo

  • #008
    Lluis Roses - 5 diciembre 2012 - 12:35

    Cómo puede ser que con tantas escuelas de negocios tan buenas, nuestra economía esté cómo está! Dónde van a parar todos estos super mastercitos?

    También destacar que no sólo existen 3 escuelas de negocios españolas en los 10 primeros puestos, sino que hay 4 entre los 25 primeros. En el puesto 23 está EADA, una magnífica escuela de negocios independiente de Barcelona.

    Saludos!

  • #009
    Jesús J. de Felipe - 5 diciembre 2012 - 13:34

    No es suficiente para sostener la argumentación de la calidad y validez del ranking el utilizar la razón de autoridad del FT (que no siempre se ve reflejada ni generalmente admitida) y la complejidad del trabajo; tampoco es suficiente utilizar la propia opinión personal del que argumenta para asegurar que el trabajo es impecable y que no se puede sospechar ni descalificar nada. Si aplicáramos estos mismos criterios a un trabajo de investigación, ya no digo científico, sino de argumentación opinable, tendríamos problemas para que fuera aceptado por un auditorio que no estuviera a priori a favor de una tesis y al que debiéramos de convencer y persuadir. Sería más conveniente a estos efectos tener acceso a los datos que normalmente se facilitan cuando se realiza un trabajo de muestreo estadístico, así como a os cuestionarios y las hipótesis de partida que el estudio trata de falsear; de ese modo se podría argumentar con más propiedad sobre la autoridad y la calidad de estos rankings. Es normal y sano ser escéptico con estos rankings, sobretodo cuando se ha observado alguna experiencia de ver cómo se encargan, realizan y aplican estudios y clasificaciones de productos y de empresas con objetivos directos o indirectos de influir sobre los consumidores y usuarios con claros intereses y ánimo de lucro. Lo mejor sería que esos datos y metodología de estos rankings fueran claros y estuvieran plenamente accesibles para que los lectores y usuarios pudiéramos formarnos nuestra propia opinión y argumentar nuestras diferencias de opinión contando con esas bases.

  • #010
    Jose Luis Portela - 5 diciembre 2012 - 13:52

    Yo cuando tenía 33 años vendí mi coche y pase a utilizar el metro y autobús (a esa edad) y además pedí un crédito con carencia de dos años y duración de 8 años, para poder pagarme el Executive MBA del IE. Es la mejor inversión que jamás he hecho porque invertí en mi cabeza. Mi vida cambio en lo personal y el máster logró que al terminar fuera mejor persona, porque era capaz de entender el mundo que me rodea y poder adaptarme a el. EL cambio profesional posterior vino como consecuencia de esto.

    Estar rodeado de tanto conocimiento y sobre todo de una cultura de profesorado y alumnos con tanta diversidad, fue una experiencia inolvidable. A partir de ese año tuve la oportunidad de formar parte del claustro asociado y a día de hoy ademas de profesor asociado en el dpto de operaciones, dirijo un importante programa superior en dirección estratégica de proyectos que se ha consolidado como una referencia en el mercado. Los números hablan por si solos, en cinco ediciones y con 128 alumnos que lo han cursado, solo 4 alumnos de todas las ediciones (3%) se encuentran en búsqueda de empleo. Si lo comparo con los ratios de empleabilidad de los sectores es todo un éxito.

    Y que nadie se lleve a engaño, el hacer un master ayuda a aumentar claramente la empleabilidad de cualquier candidato, y las cosas están difíciles, pero los datos y no las opiniones reflejan que el estar preparado, hablar ingles y estar al dia, aumenta significativamente la probabilidad de tener un buen trabajo.

  • #011
    Diego - 5 diciembre 2012 - 13:58

    Buenos días,
    tengo la suerte de haber cursado este año un Programa Superior en el IE. Ahorré durante bastante tiempo para poder pagármelo porque pensaba que mi vida tanto profesional como personal cambiaría. De hecho, el Programa me ha hecho cambiar de punto de vista en lo profesional. No he dicho mejorar, he dicho cambiar. Lamentablemente, 5 meses después de terminar el Programa, la empresa para la que trabajaba decidió no renovarme el contrato y ahora estoy en búsqueda de empleo. Pero os aseguro, que las cosas en mi cabeza han cambiado y eso es gracias, entre otras cosas, a la educación que he recibido en el IE.

    Y, desgraciadamente, no he tenido la fortuna de disfrutar de una de las clases de Enrique.
    Un saludo

  • #012
    Pedro - Jacuzzi exterior - 5 diciembre 2012 - 14:15

    La calidad no solo se mide por los rankings, lo que es importante para los fabricantes de estos, puede no serlo para los alumnos y profesores. El prestigio y el saber hacer, darán a la escuela su sitio.

  • #013
    Mario - 5 diciembre 2012 - 15:24

    Más allá del escepticismo por los rankings- #009- o por la relación entre los postgrados y la economía- #008-, al final del día lo cierto es que el IE Business School figura primera y no otra, y ello de por sí es digno de felicitación sin mezquindades.

    «Se me ocurren mil cosas que cambiaría en el IE»… un buen ejercicio de fin de curso Enrique, sería aplicar (en teoría claro) los principios de la «economía de la atención» y proponer un modelo de negocio alternativo al propio IE Business School, como los que tanto se demanda a las industrias culturales bajo pena de insulto. Es decir, un modelo de negocio donde el alumno puede disfrutar del producto final -el título de graduado- pero sin tener que pagarle un solo euro a la Escuela.

    Una de las razones por las que el IE está donde ha llegado es porque ha podido, sin ninguna duda, cobrar al alumno por el servicio recibido, lo que ha hecho del IE un negocio solvente según nos cuentas. Me atrevo a especular que sólo dos requisitos de igual importancia son necesarios para que un alumno obtenga un título del IE: por un lado aprobar los cursos, y por el otro, pagar la cuenta.

    Bueno pues, eliminemos la parte pecuniaria e imaginemos que basta con aprobar los cursos y que el IE está «tecnológicamente» impedido de negarse a dar el título a quien apruebe, ni puede evitar el libre acceso online a sus exámenes y aulas de clase a cualquiera que le haga click a postgradosyonquis.com. ¿Podría funcionar tu escuela de negocios con los mismos parámetros con los que se exige que funcione la industria cultural?¿Veríamos a los profesores del IE con t-shirts del BBVA en los streamings para solventar los gastos?¿Tendría igual valor en el mercado un programa de 30,000 euros si cualquiera pudiese aceder y graduarse en él por internet sin pagar nada?

    Propongo este simple ejercicio intelectual porque el IEBS es precisamente eso, una «business school», y la mejor de Europa nada menos, pero demasiado a menudo vemos como el primordial tema de un modelo de negocio viable en internet para la producción intelectual se pospone, se minimiza o las más de las veces, se entierra bajo insultos y diatribas.

  • #014
    Enrique Dans - 5 diciembre 2012 - 15:33

    #009: Jesús J., te animo a intentar pagar para aparecer en el ranking del FT. Buena suerte :-) Y en cualquier caso, la metodología aparece descrita con todo lujo de detalles en el apartado correspondiente de la revista…

  • #015
    jincho - 5 diciembre 2012 - 16:18

    Enhorabuena. Me ha encantado el entrecomillado que usas al hablar de los «masters» de las universidades españolas… intuyo una sana ironía y una mala uva al mismo tiempo, ¿no?

    Y la pregunta del millón, sin duda es saber a que se debe ese tremendo éxito de una iniciativa privada y al mismo tiempo el horrible fracaso en la universidades públicas ( y buena parte de las privadas, sobre todo las más jóvenes).

    #001: hombre, Stanford y la CEU San Pablo no son precisamente universidades para todos…

    Saludos.

  • #016
    Marcelo Gaona - 5 diciembre 2012 - 16:49

    Felicitaciones Enrique y a la IE por semejante logro. Saludos.

  • #017
    Fe - 5 diciembre 2012 - 17:53

    Enrique, Guys!!

    Bueno, hombre que te puedo decir, sí lo has dicho todo…

    Me has vendido la «IE Bussiness School» como un producto de «calidad y excelencia», que… «vale lo que cuesta»… porque más adelante se ve «los beneficios de la inversión»…. esa es la idea, obviamente

    Ahora, si tú consideras, que «hay algo que cambiar ó hay algo que le falta»… adelante has tú propuesta, así no dependa de tí… (como lo mencionas)… pero tus años de experiencia lo avalan todo… y si es para un bienestar común… ni te lo piense!!… (ojo…»sugerencia», en buena onda, x si acaso)

    Y no me queda más que «Felicitarte doblemente» x tí y x la IEB!!!
    Hugzz!!

    Nota::: Y si «Yo»… tuviera un Teacher como tú…. tú creees que me perdería tus clases… jamás de los jamases, eso escribelo!! :-)

  • #018
    Nico - 5 diciembre 2012 - 18:06

    Enhorabuena, por la parte que te toca. Da alegría leer esto cuando parece que todo lo español está por los suelos.

  • #019
    Alberto Torron - 5 diciembre 2012 - 21:17

    Enhorabuena, Enrique.

    Son muy buenas noticias. Ver que no hay caminos únicos y que el esfuerzo y la claridad de ideas dan tan buenos resultados es simplemente fantástico.

    Poco ha sido mi contacto con el IE hasta la fecha, pero la verdad es que las veces que he estado allí he vuelto impactado por la amplitud de miras de los alumnos y los profesores. Los resultados suelen ser fruto de un gran trabajo. En este caso sin duda es así.

    Un abrazo.

  • #020
    Antonio J. Roldan - 5 diciembre 2012 - 22:07

    #015: Stanford ofrece cursos gratuitos online y los másteres de la CEU San Pablo, al ser oficiales te ofrecían acceder a los Préstamos Renta Universidad, que estoy pagando yo.

    La próxima vez investiga algo más que mirar en Linkedin.

  • #021
    Jesús J. de Felipe - 6 diciembre 2012 - 01:22

    Enrique, te invito a que preguntes a los editores de números especiales de periódicos y revistas, cómo les salen los números de sus publicaciones, solo hay que mirar la publicidad de la revista y pensar en qué es lo que la atrae. Creo que el FT también hacía revistas especiales de ocio, vinos y coches y productos variados de lujo además de otros más relacionados con su especialidad de inversiones y dinero en los que también suele haber rankings. En cuanto a la metodología a salto de click, lo siento, del mismo modo que con el otro ranking de otra empresa que pusiste en tu blog hace unas semanas la metodología expuesta no solo dice poco o nada relevante sobre la significación estadística de la muestra, del cuestionario, de cómo se realiza, de las hipótesis, etc. Me pregunto si sentado en un consejo de administración de una empresa tecnológica comprarías un estudio de mercado y una recomendación de inversión basada en criterios similares y jugarte con ello tu dinero.

  • #022
    Daniel Canomanuel - 6 diciembre 2012 - 12:00

    Enhorabuena Enrique a todos los que formamos el IE Business School. Tenemos muchos motivos para sentirnos muy orgullosos. Yo también tuve como profesor al GRAN José Mario Álvarez de Novales en el año 1998 y seguro que él también se siente muy orgulloso porque tiene mucho que ver en todo esto. Gracias por el post. Un abrazo, Daniel Canomanuel

  • #023
    carlos hernandez guarch - 6 diciembre 2012 - 14:07

    Una cuestión que me sorprende es cómo teniendo la mejor escuela europea tenemos el sector empresarial más débil y un sistema corrupto hasta el tuétano, con las mayores corporaciones escialziadas no enc rear riqueza sino en absorberla en base a oligopolios y carteles que nos sangran diariamente. Se ve que las clases de deontologia empresarial no son bien asimiladas y habría que dar clases de refuerzo.
    Nota: ejemplos constructoras corruptoras o complices via comisiones,y que se involucran en las concesiones de hospitales, tratamientos de residuos, aguas, etc etc,y desde ahi sangran los presupuestos electricas con unos precios que son los más caros de europa, idem carburantes, con un sector financiero que ya es capaz de meter a su abanderado en el supremo ufff.

  • #024
    César Meza - 7 diciembre 2012 - 06:38

    Ser agradecido es una de las cualidades más maravillosas que tiene el ser humano, y tu post refleja la gran persona que eres. Luego de 22 años, demuestras una pasión y una lealtad digna de admirar. Es un orgullo ser también MBA del IE, y también agradezco el año tan intensivo, los grandes maestros y los excelentes compañeros. Bien merecido primer lugar.

  • #025
    Luis Villaverde - 7 diciembre 2012 - 10:57

    1)¿Cuál es el índice de suspensos? ¿o es que no hay suspensos?

    2)El éxito de los alumnos no será por las redes de contactos que se hacen ahí??

    Un exprofesor mío, que sigue dando clases en USA, siempre decía, no es que los yankis sean más listos, simplemente tienen más dinero, y todo se compra. Si tienes dinero por detrás acabarás doctorándote, y si vas a una uni de las grandes, pues conocerás a los hijos de las grandes familias y fortunas, y acabarás en sus redes sociales. Tienes que ser muy zopenco para no triunfar en ese ecosistema.
    Mi opinión es que además de aprender, evidentemente algo te enseñarán; en todos estos sitios de «pago», lo que pagas más que el conocimiento es la «contactología».
    Sería interesante un estudio que mostrase la evolución en la situación laboral de los ex-estudiantes de todos estos centros en función de los contactos realizados en dichos centros. Y ver cuantos han volado «libres» y cuantos por «contactología». Una prueba «ciega» donde se valorase a la persona sin saber si su formación es del centro A o el B. Simplemente ambos tienen un MBA o el título que sea, pero sin decir donde lo sacaron.

  • #026
    Alejandro Vera Palencia - 7 diciembre 2012 - 12:11

    Las escuelas de negocio en España son como los festivales, las mejores del mundo pero para que solo toquen extranjeros.

  • #027
    asdfgh - 7 diciembre 2012 - 13:26

    Mi primer y único contacto con una prestigiosa business school fue de lo más lamentable. La entrevista previa de acceso fue absolutamente patética, en resumen sólo interesaba si tenías suficiente «caché» (trabajo en empresa de renombre y sueldo). Por suerte trabajaba en una de las «big five» y el sueldo no estaba nada mal. Acabe tan asqueado de ese mundillo que de hecho mi MBA part time sigue pendiente y dudo muchoooooooo que lo acabe. Como ya se ha dicho anteriormente no son más que un punto de encuentro para establecer actuales y futuras relaciones de un sector muy concreto de la sociedad, por cada «pobre» que accede con mucho esfuerzo hay 50 que acceden de forma muy asequible. Todo esto comprobado en primera persona y coincidiendo con otras muchas personas que han acabado el MBA (en otros centros). No creo que IE sea algo distinto (quizás en un escalafón elitista todavía más alto) por lo que hasta que no lo compruebe por mi mismo, que lo dudo, todo es fachada y más de lo mismo. A pesar de ello mis felicitaciones por mantenerse ahí.

  • #028
    Joaquín Alvarez - 10 diciembre 2012 - 17:20

    Estoy de acuerdo plenamente con lo que dice Enrique, he realizado un programa MBA Executive en el IE y puedo decir que la mayoría de los alumnos se pagaban el programa, bien con créditos o bien con sus ahorros y sacrificios después de varios años de trabajo. No es en absoluto una escuela de negocios de hijos de papá.

  • #029
    Luis H - 13 diciembre 2012 - 23:27

    Con 24 años pedí un crédito de 12.000€ para hacer el Gesco de ESIC. Cambie de trabajo y de campo de trabajo (entrando de becario) en una multinacional que me interesaba mucho por CV.

    Con 33 años, con ahorros y otro crédito del Banco Popular entre en el Executive MBA del IE. 44.000€. Papa no me pago nada. Y si, había niños de papa, había gente que se lo pagaba su empresa, y había muchos como yo.
    Por cierto, mi mujer hizo a la vez un Master en Marketing allí a la vez. También se lo pago ella.

    Eso si. No tenía un BMW. Iba en un Seat, y no me he comprado casa hasta los 38 años. No me quejo de como me va. Vuelvo al IE cada vez que puedo.
    Y si, supongo que en la vida cada uno elige su camino.

    Sin decir que todo es perfecto, para mi fue una experiencia excelente.
    Ganas 4 cosas allí: mejora de tu CV, red de contactos, conocimientos, y sobre todo disfrutar de primeros espadas en sus ámbitos que son verdaderos cracks en lo suyo y que te generan impacto para toda tu vida. Aunque parezca pretencioso, cambias a nivel profesional, pero a nivel personal también.

    Eso si. NO es un camino de rosas. NO te regalan nada. SI echan a gente por la campana de Gauss. Te llevan al limite. Tienes jornadas permanentes de 20 horas entre trabajo y Master, pero es una experiencia vital para toda su vida.

    Y no. A mi tampoco me dio clase Enrique, pero me dieron muchos maestros: Rafael Pampillon, José Luis Calleja, Alberto Andreu y otros cuantos que por allí andaban.

  • #030
    Ricardo Figueroa - 1 abril 2013 - 19:15

    Felicitaciones a ti y al IE donde tuve la fortuna de estudiar hace 10 años, ahorrando por varios años, con préstamo como bien mencionas y viajando desde Perú para dedicarme a lo que entonces era Master en eBusiness.
    Eres un crack Enrique, había dejado de leer tu blog, pero es impresionante que escribas todos los días con la calidad de información que provees.
    Vamos a ver si me animo a volver a escribir mi blog que dejé olvidado hace varios años por falta de tiempo.

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