En la historia del aprendiz de brujo, popularizada por Goethe y luego por Disney, un joven inexperto intenta manipular fuerzas que no comprende, con resultados desastrosos. La metáfora no puede ser más adecuada para describir lo que estamos viendo estos días con el uso irresponsable de la inteligencia artificial por parte de algunas compañías.
El caso de Elon Musk, su red social X y su empresa xAI, muestra hasta qué punto se está jugando con fuego sin el más mínimo respeto por las consecuencias. No es «un errorcillo» o «un chiste», es una forma de hacer las cosas.
El martes 9 de julio, la directora ejecutiva de X, Linda Yaccarino, recién «degradada» tras la fusión con xAI a Directora de Social Media, anunciaba inesperadamente su dimisión. Su ...