La crisis energética alemana, derivada de la fuerte dependencia del gas ruso, está siendo objeto de muchos comentarios recientemente, con voces que culpan del problema a la decisión de cerrar sus centrales nucleares. De hecho, ha surgido incluso un movimiento en Alemania que pretende olvidar el pasado y manifestar actitudes más positivas hacia la energía nuclear.
Sin embargo, muy pocos están tratando el problema en su conjunto: todo el mundo habla de la crisis energética alemana, pero la francesa, país que apostó fuertemente por la energía nuclear, es en realidad mucho peor. Los precios de la electricidad francesa están sensiblemente por encima de los alemanes, mientras muchas de sus centrales nucleares están teniendo problemas ...