Desde la brutal caída del valor de su acción que comenzó el pasado noviembre debido a algunas cifras que parecían presagiar una saturación de su mercado, la dirección de Netflix ha estado meditando formas de revivir la tracción de la compañía, y han diseñado un plan para ello.
¿Cuál es el problema? Que como indicaba en mi artículo anterior sobre el tema, quienes toman las decisiones sobre el destino de Netflix no son quienes la fundaron y la convirtieron en lo que es, sino una dirección de segunda generación que además, para más preocupación, proviene de la industria tradicional, con el consiguiente choque cultural.
La evidencia es clara si echamos un ojo a las decisiones que la compañía parece estar ...