Estos tres artículos, «Don’t be fooled. This is the calm before the AI storm«, de Megan McArdle en The Washington Post; «How AI is changing American jobs from teachers to nurses« en Bloomberg, y «It pays to use AI on the sly at work« en el Financial Times, me han hecho reflexionar bastante sobre el proceso de difusión de la inteligencia artificial como innovación.
La adopción de la inteligencia artificial no avanza al ritmo de su desarrollo tecnológico. Como señala McArdle, estamos en una especie de «guerra de broma» como la que recibió ese nombre entre 1939 y 1940, en donde la transformación es inminente, pero aún no se percibe de manera plena. La resistencia cultural, la falta de comprensión y la fuerte inercia organizacional ralentizan su integración efectiva en la sociedad. ...