La democracia como connotación negativa

IMAGE: Ivelin Radkov - 123RF

Mi columna en El Español de esta semana se titula «La democracia sobrevalorada«, y trata de elaborar en torno a la peligrosísima idea de que la democracia se ha convertido en una especie de handicap o de problema, en un sistema que penaliza la eficiencia de los países, y que aquellos que deciden que no es necesaria o que puede resultar prescindible pueden obtener ventajas comparativas e incluso, eventualmente, mayores niveles de bienestar económico.

¿Qué país ha sido capaz de generar un producto interior bruto mayor a valores de paridad de poder adquisitivo, o ha sido el más eficiente a la hora de elevar a millones de personas por encima del nivel de la pobreza? China, un país que en efecto, considera la democracia como algo innecesario. El país más grande del mundo en términos de población está gobernado por un partido cuyas decisiones son incontestables, que no se somete en modo alguno a la voluntad popular, y cuyo respeto a los derechos humanos ha estado siempre sometido a un fuerte cuestionamiento. Un país que somete la información a la que pueden acceder sus ciudadanos a un fortísimo nivel de control mediante el mayor sistema de censura, monitorización y vigilancia del mundo, con un ejército de censores y manipuladores mayor que sus propias fuerzas armadas, y que a pesar de todo eso, ha sido capaz de convertirse en referencia en cuestiones como el número de solicitudes de patentes o los estándares de protección de la propiedad intelectual (parece claro que el actual modelo de propiedad intelectual resulta tan irracional, fallido y absurdo que tiende a tener una existencia mucho más favorable bajo la protectora influencia de una dictadura).

China se configura como el nuevo líder mundial ante unos Estados Unidos en retroceso, una Trumpganistan que pretende volver a poner obreros en todas las cadenas de montaje y revitalizar la minería del carbón. Un líder mundial que considera la democracia un ejercicio inútil, caro y absurdo. En términos de estrategia política, un país democrático que garantice la pluralidad de fuentes de información y asegure con los medios adecuados la higiene y legitimidad de sus procesos electorales está, en un mundo hiperconectado, en desventaja frente a países en los que la dieta informativa de sus ciudadanos está severamente controlada y en la legitimidad los que los procesos electorales es un chiste. Nadie más que el gobierno ruso puede influenciar las elecciones rusas, pero es relativamente sencillo para Rusia convertirse en una fuerte influencia en las elecciones norteamericanas. La red, convertida en una herramienta de control interno en manos de autócratas, o peor aún, en un arma para influenciar procesos electorales en países democráticos.

¿A dónde se dirige el mundo cuando los países no democráticos aprenden a extraer y materializar ventajas de la red? Países capaces de justificar los mayores sistemas de control, vigilancia, monitorización y censura de su población, de alimentar las más hipertrofiadas agencias de espionaje, y de desarrollar las más demenciales técnicas de interferencia en los asuntos internos de otros países son los que parecen configurarse como próximos líderes mundiales. Por favor, lee entre líneas: soy un demócrata absolutamente convencido, una persona que jamás querría vivir en un país gobernado por un sistema distinto a una democracia. Nací en una dictadura, y aunque el dictador murió cuando yo tenía solamente diez años, puedo asegurar que no me gustó lo que tuve tiempo de ver entonces. La democracia, como sistema discutible y prescindible, como lujo absurdo cuya perversión, convertida en populismo, alumbra criaturas como el Brexit o como Donald Trump. Tenemos un problema.

 

 

This post is also available in English in my Medium page, “Democracy: who needs it?» 

 

18 comentarios

  • #001
    Angel "el bueno" - 14 abril 2017 - 11:33

    Trumpganistan….?
    Voy a ver si consigo que el alcalde de Puebla te invite a dar una conferencia aqui:
    Sanabristan…..!!!!
    Un abrazo…!

  • #002
    Isabel Iniesta - 14 abril 2017 - 11:41

    Y grave.
    Mientras te leía me ha venido a la mente 1984, de Orwell.
    Un mundo donde se manipula la historia y la realidad cotidiana para cumplir con los objetivos políticos o económicos no es un mundo sano.

  • #003
    Nacho Blanco - 14 abril 2017 - 12:00

    Y la cosa no anda mucho mejor en los países supuestamente libres como España, donde se condena a prisión a quien bromea con la dictadura; la Iglesia, con su estructura jerárquica medieval ostenta el segundo poder más grande después del propio Gobierno; y los principales medios de comunicación tratan de que sólo se sostengan las opciones políticas que interesan a sus Consejos de Administración y machacan alternativas, redefiniendo términos como «populismo», apisonando los matices y adormeciendo el debate y el pensamiento crítico abierto.

  • #004
    menestro - 14 abril 2017 - 12:29

    Yo casi que prefiero no opinar. Entiendo que hay personas que se mueven por filias y fobias, pero que de un empacho con Donald Trump pueda salir una enmienda a la totalidad de la Democracia, ya riza el rizo.

    Y por supuesto, no es lo que parece claro; lo estamos comparando con China, que es un modelo competitivo.

    ¿Mayor bienestar económico en China?

    Madre mía. Hora de comprarse ese Tesla.

  • #005
    Garepubaro - 14 abril 2017 - 13:03

    Hombre hay un ejemplo muy claro de leyes no demócraticas que cada vez seran mas imprescindibles, si China no hubiera obligado, bajo castigo, durante décadas a no tener mas de dos hijos por matrimonio, hoy no sólo China sino seguramente el mundo entero tendria un mas grave problema, de superpoblacion … y cada vez mas leyes antidemocráticas seran una cuestion de simple supervivencia de todos, como prohibir al Congo por parte de los paises poderosos tener el arma nuclear etc

  • #006
    Gorki - 14 abril 2017 - 13:15

    Sigo pensando igual que Churchill

    «Nadie pretende que la democracia sea perfecta u omnisciente. En verdad, se ha dicho que es la peor forma de gobierno excepto todas las demás formas que han sido probadas en su oportunidad».

    La democracia esta lejos de ser perfecta, para mi el mayor error, es que el voto del ignorante valga igual que el del sabio. De ese error nace el Brexit o Trump. Sin embargo sigue siendo el sistema capaz de dar la mayor libertad, seguridad y prosperidad a los ciudadanos que la tienen. Y desde luego prefiero vivir bajo una ineficiente democracia, que bajo la «eficiencia» china.

  • #007
    Paco - 14 abril 2017 - 14:41

    En mi humilde opinión el problema está en que nuestras democracías cada vez son de peor calidad. Menos educación, menos capacidad de crítica (antes hablabamos de libertad de prensa, hoy de línea editorial marcada por los grupos propietarios), mayor connivencia entre poder económico y político por no hablar del espantajo de los Partidos Políticos. Esta democracia invertebrada se autodestruye. En condiciones normales es mucho mejor que esos regímenes castrados que comentas, la pregunta es si esto es realmente democracia.

  • #008
    JUAN GONZALO SANCHEZ - 14 abril 2017 - 15:04

    Saludos…el problema es que la red ha potencializado las deficiencias de la Democracia, a la vez que permite, en manos de paises que no la tienen, la mejor herramienta de control…recuerdo el libro de Julian Assange, en el que dice que la Red se puede convertir en la herramienta mas democratizadora que ha tenido la humanidad, o la mas esclavizante…

  • #009
    Pepe Perez - 14 abril 2017 - 15:39

    Nada nuevo bajo el sol.

    En Iberoamérica ha habido dictaduras horrendas donde el desprecio hacia las libertades ha sido total e incluso a la vida de los opositores. Creo que no se puede salvar a ninguna. Sin embargo en otros ámbitos algunas dictaduras han sido mejores que otras. Se puede ver lo que dejó el dictadorcuelo Pinochet y lo que dejaron otros dictadorzuelos de su entorno y misma cuerda. Algunos dejan vivir a quién no se mete en política o toca las narices y otros ni siquiera eso, todo esto dicho sin pretender justificar ni lo uno ni lo otro.

    Y luego también hay democracias y democracias. A ver si en esta Europa o España nuestras realmente y de verdad decidimos algo o todo lo contrario. O si las garantías democráticas sólo son para los hijoputas y para el resto no que ya se deben conformar con pagar la fiesta.

  • #010
    alegret - 14 abril 2017 - 20:15

    Sr Dans:

    Le llevo siguiendo muchos años en mi calidad de Abogado dedicado a las Nuevas Tecnologías de la información.Siempre aprendo algo de usted, no lo dude. Ahora bien, este último post me ha decepcionado. Defender una dictadura como la china o la española de hace 50 años no me parece propio de alguien a quien presumo un bagaje cultural y formativo como el que Vd. tiene. Quizás sea la deformación de esas escuelas de negocios tan nocivas y perniciosas que proliferan en España, a base de pagar cantidades ingentes a los alumnos para darles una formacion ágrafa y que , en un futuro, se revelarán inútiles y pésimas formadores de la juventud.

    Un saludo.

    • Carlos Quintero - 14 abril 2017 - 21:09

      ¿Seguro que te has leído bien y has entendido el post y la columna de El Español?

    • Enrique Dans - 14 abril 2017 - 21:43

      ¿Tanto tiempo leyéndome y es hoy cuando descubres que no sabes leer? ;-)

    • Miguel Durán - 16 abril 2017 - 00:44

      Lo malo de las lecturas rápidas es que provocan juicios de valor. Caballero, le ruego que relea el artículo y considere si no debería pedir disculpas. Y sino, iluminennos oiga, haciendo Cita expresa de esos párrafos condenables sin tratar de hacer un saque de contexto. Se supone que debe saber por su profesión que la responsabilidad de demostrar la acusación es del acusador, y de momento solo he visto un tiro la piedra y escondo la mano.

  • #014
    Javier Galué - 15 abril 2017 - 11:03

    Hola Enrique. En este tema sí comento porque es mi especialidad, de hecho he escrito un libro sobre el tema y recientemente un artículo donde escribo precisamente que las democracias que hoy conocemos como tales hay que cambiarlas, evolucionar a un nuevo estadio donde se blinden muchas vulnerabilidades que pueden causar su propia degeneración o retroceso.

    En los últimos 5-10 años la política y la sociedad han cambiado a velocidades nunca antes vista, y ese fenómeno no parece que desacelerará. Los sistemas democráticos no están dando respuesta a las sociedades y las convierte en muy vulnerables ante populismos y otras formas de manipulación. Por eso es muy necesario revisar el concepto de democracia y evolucionar a otro que preserve los principios pero que responda y evolucione paralelalmente… Si te interesa te he dejado el enlace del artículo. Saludos…

  • #015
    Nicole Dyver - 15 abril 2017 - 13:06

    El problema es que la democracia cuesta dinero y no lo queremos asumir. La democracia genera consecuencias en el presente y tampoco. No se puede defender un derecho, si no se conoce el deber. Hemos convertido el bienestar de todos, en una cuestión de futuros y egos. Y la verdad plantear la democracia como una verdad absoluta tampoco me parece inteligente. Cada país tiene el gobierno que su idiosincrasia determina. Lo demás, experimentos, de dudosos resultados.

    • Garepubaro - 15 abril 2017 - 16:19

      Y ahi estan los chinos … ellos defienden su pais todos, TODOS, no como los españoles que tantos reniegan de España, si les preguntas en caso de conflicto entre España y China con quien estas ? te responden sin dudar «yo estoy con China aunque no llevara ninguna razón» … prefieren la vida en China que en España aunque este pais no lo vean mal del todo se vuelven a su pais en cuanto pueden y nos consideran mas bien como un pais de pandereta, mas bien deduzco que España y su supuesta superior democracia y tan avanzados que nos creemos respecto a los chinos, que a tantos se les llena la boca inutilmente, les da pena y en el fondo nos desprecian ven a España algo mas torpe que ellos, y ven su pais China superior y como que esta en lo correcto y desde luego se creen que van en mejor camino y con un futuro mucho mas claro que el español

  • #017
    Cristina - 17 abril 2017 - 18:13

    Yo pensaba o más bien creía que la democracia o apariencia de ella, dependía en gran medida de los negocios y de su aparente continuidad y/o aparente seguridad jurídica. debo leer más veces tu articulo :-)

  • #018
    Luis Hernández - 18 abril 2017 - 09:36

    En mi opinión no se puede hablar de verdadera democracia en un mundo artificialmente dividido en países. Seguir compitiendo unos contra otros buscando ventajas sobre los demás (ya sea mediante procedimientos democráticos locales, o no) es cada vez más absurdo e insostenible.
    Lo que se decide en un lugar, tiene cada vez más repercusión sobre el resto del mundo y tomar decisiones unilaterales porque «benefician» a tu parcela de territorio, aunque sea perjudicial para otros, nos perjudica en realidad a todos.
    Tenemos el cerebro de un cromagnon, una organización medieval y una tecnología de dioses.

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